De la Redacción
TULUM, 26 de enero.- El antes apacible municipio de Tulum, ahora se encuentra hundido en la narcoviolencia, al sumar su tercer ejecutado en este 2019, ya que un sujeto después de ser brutalmente torturado fue degollado en un camino de acceso a una propiedad privada ubicada con rumbo al municipio de Felipe Carrillo Puerto, sobre el cadáver fue dejada una cartulina color naranja escrita con tinta negra el siguiente mensaje: “Esto me paso por rata y traicionero”.
Fue la mañana del sábado y mediante una llamada anónima que reportaron a las autoridades policíacas el cuerpo sin vida de un hombre sobre el camino de acceso a una propiedad privada ubicada a escasos 10 kilómetros al sur de la cabecera municipal.
Sitio en el cual arribó la policía municipal y detectó el cuerpo tirado a la orilla de la vera del camino, por lo que procede con el acordonamiento del lugar en espera de la llegada del perito criminalista, y agentes de la policía ministerial para llevar a cabo las diligencias y el levantamiento del cadáver.
El occiso que presentaba una herida en el cuello de 20 centímetros y a la altura del pecho tres heridas penetrantes, igual presentaba una herida en el dedo pequeño y mano.
Se encontraba a escasos 150 metros de la orilla de la carretera federal; vestía pantalón de mezclilla, sport blanca y tenis de color azul, el cual contaba con diversos tatuajes en el cuerpo.
Se hallaba una cartulina sobre el cuerpo con narcomensaje que rezaba: “Esto me paso por rata y traicionero”, luego de concluidas las diligencias el cuerpo fue trasladado al Semefo para la necroscopia de Ley para determinar el médico legista las causas de su muerte.
Con la muerte violenta del occiso que en vida respondía al nombre de Juan Carlos Barrios Juárez, quien hace unos días fuera detenido por violencia familiar, luego de golpear a su pareja, al estar bajo los efectos del alcohol, fue localizado durante la mañana del sábado en solitario camino de terracería a la altura del kilómetro 219; se consuma el ejecutado número 3, en el noveno municipio, el primero ocurrió el pasado 1 de enero en el Cenote Zama, ejecutado con arma de fuego, el segundo fue por machete, dejando abandonado el cuerpo, en un camino de terracería, colindante a la avenida Kukulcán el pasado 15 de enero.