La diputada Milagros Romero Bastarrachea (MC) señaló ayer que el Fraccionamiento Dzoyolá se mantuvo en el abandono por años, pues formaba parte de la zona de traslape entre Mérida y Kanasín, ya que nunca se llevó a cabo su municipalización.
“En este caso tenemos que no hubo municipio que los reconociera, pues estaban en una zona de indefinición, además de que fue una colonia que no se entregó”, expuso.
Dijo que en febrero pasado el Congreso del Estado aprobó el acuerdo limítrofe que establecieron los municipios de la zona conurbada, entre ellos Mérida y Kanasín, donde se acordó que el citado fraccionamiento formaría parte del segundo.
Expuso que antes dicho fraccionamiento no pertenecía a Mérida y, por ello, el Ayuntamiento no podía intervenir porque hubiera estado invirtiendo recursos en un lugar que no le corresponde.
La legisladora, vicepresidenta de la Comisión de Desarrollo Municipal, Regional y Zonas Metropolitanas, dijo que en el caso de Mérida el Ayuntamiento no podría ya intervenir o municipalizar el citado fraccionamiento, pues de hacerlo incurriría en irregularidad.
“Línea divisoria”
Dijo que es comprensible que los vecinos del fraccionamiento estén molestos con el cambio a Kanasín, pero señaló que los diputados sólo aprobaron el acuerdo hecho por los mismos alcaldes y, en este sentido, la línea divisoria fue el Periférico.
“Es de entender que no estén muy contentos con que hoy les corresponda Kanasín, que es un municipio con ciertos atrasos, pero ahora le tendrán que exigir a la autoridad de esta localidad, en lugar de estar añorando pertenecer a un municipio como es Mérida, al que no pertenecen”, insistió.
Reiteró que el fraccionador, en este caso, nunca entregó el fraccionamiento a Mérida, por lo que nunca se hizo la municipalización.
Expuso que lo anterior sería responsabilidad del fraccionador, más si les prometió que formarían parte de Mérida cuando sabían que se trataba de una zona indefinida.
Dijo que, aunque en las escrituras de las casas del fraccionamiento apareciera que eran de Mérida, la realidad es que siempre existió la indefinición y por ello el Ayuntamiento nunca se hizo responsable, porque no le correspondía.
Informamos que vecinos del Fraccionamiento Dzoyolá pidieron al alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha, que se lleve a cabo la municipalización y que se cobren las fianzas a las empresas constructoras que, aseguran, los defraudó y con ese dinero se construyan escuelas y un centro comunitario.
Sin embargo, aunque el pasado miércoles el alcalde les dijo que les daría una respuesta en tres días, hasta el momento no ha habido tal.
(David Rico)