Por Ricardo Jesús Rivas
CHETUMAL, 29 de enero.- Una supuesta “austeridad” es aplicada en la Secretaría de Seguridad Pública; sin embargo, todo empezó desde los agentes de menor rango, ya que la cocina para la tropa fue cerrada parcialmente y está siendo desmantelada hasta que se lleve a cabo su cierre total. Los policías que trabajan 24 horas, sin poder salir de sus servicios, ya prácticamente no reciben alimentos. El titular de la dependencia, Jesús Alberto Capella Ibarra, decidió recortar de tajó la alimentación de los uniformados y mantener operativos sus excesivos lujos, según señalaron agentes de la Policía Estatal Preventiva.
De “cobarde acción” fue calificada la orden de cerrar parcialmente el comedor de la Policía Estatal y aperturarlo ocasionalmente, hasta que sea completa la clausura de la cocina. Esto con el pretexto de una “austeridad” obligada entre la tropa de la corporación de seguridad estatal, por lo que Capella Ibarra somete a pasar hambre durante sus 24 horas de servicio a los policías.
Desde hace un par de semanas, el comedor ha sido sistemáticamente desmantelado, incluso, los aires acondicionados fueron retirados y la alimentación modificada, con miras a desaparecerlo.
La semana pasada, los días martes y miércoles, los policías recibieron únicamente una naranja como alimento para sus 24 horas de trabajo, sin poder salir a comer.
Los agentes reportaron que sistemáticamente la alimentación fue reducida, de 150 gramos de comida que recibían, fue disminuido a 50 gramos; el agua de fruta pasó a agua con saborizantes. Sin embargo, actualmente no reciben nada de comida y los permisos para ir a comer no son autorizados, por lo que literalmente son matados de hambre.
Los uniformados comentaron que recibían alimentación, los que laboran de 24 horas, que generalmente son establecidos en servicios fijos, es decir, los que se capacitan en la academia, la vigilancia del tutelar de menores y del Centro de Reinserción Social de Chetumal, así como patrulleros de 24 horas, incluidos los de la Dirección de Tránsito, a quienes se ha ordenado se les relegue aún más.