CHUINA, Champotón, Campeche.- Nadie sabe mejor el dolor que una madre, así lo sigue demostrando la Virgen María ante cada uno de sus hijos, que hoy no se compara con lo sufrido de su hijo Jesús, desde que estuvo en el vientre hasta que nació, y al crecer fue mucho más su dolor hasta verlo crucificado, sin embargo no desmayó porque eran los designios de Dios.
Ante una iglesia repleta de feligreses en Aquiles Serdán, el Obispo Francisco González González destacó que nadie compra el sufrimiento, sino lo vive en carme propia, eso le sucedió a un joven que creía que todo se podría hacer con rapidez, sin pensar que cada ser humano tiene sus propias habilidades, no es lo mismo ser joven con muchas habilidades que un persona en edad adulta que se vuelve torpe, él pensaba que todo se podría hacer sin mayores problemas.
Hasta que un día sufrió un accidente que lo dejo gravemente herido donde estuvo meses enteros convaleciente, ya no era aquel joven que se desesperara porque la lentitud en se conduce muchas personas ahora entendía que cada persona tiene su propio sufrimiento, mucho más es el entendimiento que con justa a razón es que la Virgen María entiende el dolor de cada uno de sus hijos y ella está presto para escuchar a su Hijos.
Sacrificio por sus hijos
Se acerca el día de recordar el dolor sufrido por Jesús al ser golpeado encarnizado por el pecado del pueblo de Dios, y en esta ocasión es María la Virgen de los Dolores, por el sufrimiento del ver al que hoy reconocemos a Jesucristo como el salvado del mundo, hermanos es el momento de mirar aquel que por su sangre no redimió y nos salvó al morir en la Cruz ese es Jesús que hay que recodar siempre.
En esta ocasión las familias congregadas eran de Palenque Chiapas, Tzucacab, Yucatán, Maxcanú, Tenabo y del interior del Estado de Campeche.
(Texto y fotos: Erasmo Cruz)