ESCARCEGA, Campeche.- José del Carmen Méndez Santos, padre del campesino Rigoberto Méndez Mateo, quien presuntamente fue asesinado a golpes por tres agentes de la Policía Municipal de Carmen que, ahora se sabe, estaban adscritos al destacamento de Aguacatal, y no de Mamantel como informaron al principio, exigió justicia por lo ocurrido y demandó aplicar todo el peso de la ley contra los tres policías, quienes ya estarían en manos de las autoridades ministeriales y sujetos a investigación.
“Llegó el comandante que está en la Agencia del Ministerio Público de Aguacatal, y nos dijo que los tres policías ya están en Ciudad del Carmen, sujetos a investigación de las autoridades ministeriales para que se esclarezca el homicidio de mi hijo”.
Señaló que los policías se llevaron a su hijo de 32 años, cuando éste caminaba a medio pueblo de En Quebrache, justo enfrente de la casa de la agente municipal, Mariela Jerónimo Narváez, al lado de un kínder, pero nadie se explica el por qué, ya que sólo vieron cuando éstos le cerraron el paso con la patrulla y lo subieron enfrente de todos, a punta de golpes.
Él, comentó, se encontraba trabajando en su parcela cuando ocurrió la detención de su hijo, a quien los agentes policíacos habrían confundido con otra persona, ya que lo que saben es que la agente municipal solicitó la presencia de los policías por un supuesto robo, más cuando llegaron los uniformados ella ya no se encontraba en el pueblo, pues se había ido a otro lado a jugar voleibol.
“Hasta ahora no me ha dado la cara. Ni siquiera se acercó a nosotros para ver en qué podía ayudarnos, pues en el fondo sabe que estas cosas pasaron porque ella llamó a los policías, pero no se quedó a atenderlos y explicarles a quién había que detener, así que se llevaron a mi hijo. No sabemos si por instrucciones suyas o de alguien más, por eso ella también debe ser investigada por las autoridades ministeriales, para que diga quién puso a Rigoberto como objetivo”, agregó.
Méndez Santos sostiene que a su hijo lo mataron los policías, pues hay varios testigos que vieron cómo lo iban golpeando en la patrulla, y así lo hicieron durante su salida del ejido por la carretera estatal que se enlaza con la carretera federal Villahermosa-Escárcega, pues en el camino hallaron el cabello que le iban cortando mientras lo golpeaban, por lo que creen que cuando los policías lo llevaron a Aguacatal, supuestamente desmayado, en realidad estaba muerto por el mal golpe que le dieron en la cabeza.
Indicó que acudió a presentar formal denuncia por esos hechos, y que las autoridades ministeriales les garantizaron que se está investigando a fondo este caso, el cual guarda muchos secretos, por lo que esperan que no se encubra a los policías, ya que la culpabilidad está admitida al hacerse cargo ellos mismos de todos los gastos de adquisición del ataúd en el que se lo entregaron, ya listo para sepultarlo, pues le dijeron que el presidente de Ciudad del Carmen, Oscar Rosas González, brindó la ayuda para la caja.
(Texto: Martín Contreras /
Fotos: Especial)