Fernando Muñoz Castillo
1
Ya no cabe la menor duda, tengo que seguir los consejos de mi prima en tercer grado, la Muñeca Fea, es mejor y más confiable hablar con la escoba, el sacudidor, el ratón nudista y la cucarachita Martina la huerfanita, Mtro. Limpio el desinfectante de mala energía, los espíritus que viven en mi casa, los fantasmas que a veces se confunden y golpean a mi puerta, los (as) prostitutos (as) que se menean ondulantes como olas de Puerto Escondido y pasan por las noches rumbo a los prostíbulos culturales que abundan en el Centro Histérico y Peripatético.
Porque en verdad, los seres humanos están de mírame y no me toques, y por cualquier cosa te gritan:
“Estás ‘histérico”’.
Antes hubieran dicho:
“Estás neurótico, tómate una cucharada de neurofostato skay”.
Pero después que el cardiólogo alias la Cantanta Calva de Tacones Altos puso en mi informe médico que estoy para camisa de fuerza, loco y medio, que se inventó un infarto de miocardio y además lo firmó y luego rió desquiciada mientras aplaudían su pareja quirúrgica… creo que puedo entrar a la fase de esquizofrenia chuchulesca.
Es justo y necesario. ¡AMÉN!
2
Los meridianos están todavía con la boca abierta sin importar que les entren moscas, después de haber gozado y admirado a los músicos colgantes de Babilonia tocar al estilo de la banda musical del Mtro. Costurica, y alzar las patitas muy orondos. Pues, a pesar de los deseos de los amargados, a ninguno le hizo ¡block! su cocoliso extranjero al tocar el suelo del Remate.
¿No hubiera sido más chévere ver y oír esto en el Kukulkán o en uno de esos súper estadios meridanos para espectáculos espectaculares y grandilocuentes?
3
Por su lado, Diego Torres pintó de color esperanza a todos los que asistieron a su concierto en la Plaza Grande, en verdad, todos necesitan que les pinten el horizonte o lo que sea de color esperanza ante la contundente realidad más fuerte y resistente que el muro de Trump y su poot platinado al estilo Jean Harlow, mientras cual foca polar del acuario de Minnesota, asiente ante una sardina que le muestra su domador.
4
Nada peor que una mala relación a la que se le quiere idealizar como el amor entre Francisco José y Sissi Emperatriz corriendo por la Plaza de San Marcos…o cuando menos corriendo en el Paseo de Montejo, del remate hasta el exclusivo Fracc. Country Club.
Pero no existe nada peor que vivir las fantasías estilo Susy Secretos del Corazón…o peor aún como las del programa de tivi: Enamorándose.
5
Este mes, cumple 20 años de haber fallecido la actriz, bailarina y rumbera de teatro, cine y televisión: Meche Barba. Una excelente bailarina que comenzó de niña como alumna de Nina Shestakova y luego pasó a ser de los coros del teatro del Panzón Soto, para brincar de allí al cine.
Hizo muchas giras a Mérida con Daniel “Chino” Herrera, primero formando dúo con su hermana Carmen como Las Mascotitas Barba, y luego como estrella rutilante, bailando una jarana rumbeada con el Chino en el Teatro Fantasio.
Sigue viva en nuestros corazones y en nuestros recuerdos infantiles de cuando veíamos las cintas de rumberas en el cine Encanto. ¿Te acuerdas, Ariel Avilés?