
Ya estamos por entrar al mes de agosto y las condiciones ambientales deberían ir cambiando, pero resulta que los modelos marcan que, al menos los primeros 15 o 20 días, seguirá la calma en el Atlántico tropical, pero no para la zona subtropical del Atlántico, cerca de la costa Este de los Estados Unidos. Será hasta fines de este mes que deberemos estar en una fase muy favorable de la oscilación Madden Julián y con ello la posibilidad de la formación de ciclones tropicales en la zona será muy grande.
También se sabe que, desde fines de agosto hasta la primera quincena de octubre se forma el 90% de los ciclones tropicales de la temporada, y también en esta etapa se presenta el “pico” o fase intensa de la misma, que para la Península de Yucatán y la cuenca es de aproximadamente el 20 de agosto al 15 de octubre, y como es sabido, en septiembre es la fase intensa de la temporada, cuando se ha presentado la gran mayoría de los grandes ciclones en forma de huracanes intensos que han afectado a la Península y sobre todo al estado de Yucatán, siendo el ultimo intenso “Isidore”, en el año de 2002, y para la Península el huracán “Dean”, en el año 2007, que fue a fines del mes de agosto.
Ustedes se preguntarán ¿y los ciclones tropicales del año pasado no contaron? Pues aunque fueron dos los que nos afectaron, el primero muy temprano en la temporada “Beryl” a fines del mes de junio y principios del mes de julio, y luego el susto mayúsculo con “Milton”, un huracán de crecimiento explosivo, en el mes de octubre, que nos afectó aunque indirectamente; ninguno de ellos fue de categoría intenso según la escala Saffir-Simpson. Lo que sí, “Beryl” paso corriendo y poca fue su afectación como huracán moderado a su paso por el Centro y Norte de Quintana Roo y el Este y Norte de Yucatán.
Ya llevamos en Yucatán 23 años sin afectación de un ciclón tropical intenso, y 18 años en la Península. Es preocupante, ya que el promedio de afectación para el estado es de 9 a 11 años en promedio, y para la Península, de 7 a 9 años en promedio. Y aunque no hay nada escrito en piedra y ya estamos en el rango de probabilidad que nos afecte alguno intenso, pudieran pasar otros 23 y 18 años, respectivamente, sin afectación alguna. Esta temporada estamos en fase neutra del ENSO y se espera regrese el fenómeno meteorológico de La Niña. Según nos indican los modelos, en el mes de octubre, al estar en fase neutra, en teoría La Niña debería intensificar la temporada de ciclones; y no sólo eso, también provocaría que se prolongue la fase intensa todo el mes de octubre y principios de noviembre, muy similar a lo ocurrido el 2020, y eso sí es de preocupar.
Pero como se dijo al principio, los modelos marcan que al menos los primeros de 15 a 20 días agosto seguirá la tranquilidad que ha predominado esta temporada para la zona del Atlántico, Mar Caribe y Golfo de México. La actividad ahora ha estado presente en el Océano Pacifico, y eso, más otras situaciones de índole atmosférica, no han permitido que el Océano Atlántico se active, ya que los vientos cortantes están más activos de lo normal; aire seco que nos manda la Alta de Azores y la zona de formación de ciclones tropicales entre África y el Mar Caribe está con una atmósfera muy estable.
En breve, a principios del mes de agosto, se publicará el ultimo pronóstico de la temporada de ciclones tropicales por la Universidad Estatal de Colorado, EE.UU. y no sería nada raro que vaya a la baja el número de posibles formaciones de ciclones tropicales, pero recuerden que, sin importar el número a formarse, debemos estar preparados por si hay un cambio repentino de esta aparente calma engañosa.