Quintana Roo

Tráfico de influencias en la Sesa

De la Redacción

CHETUMAL, 4 de enero.- A menos de tres meses de ocupar el cargo como subdirector de Recursos Humanos de la Secretaría de Salud, Eduardo García Girón le otorgó base al hijo de 19 años de su “brazo derecho” en la dependencia, Landy del Carmen González Pelayo, una muestra del tráfico de influencias en la Sesa.

Esto ocurre cuando hay personas preparadas con estudios de nivel superior y con más de cinco años de antigüedad que no han recibido una plaza.

Esta irregularidad en la dependencia que encabeza Alejandra Aguirre Crespo, fue confirmada con el alta de Héctor Julián Narváez González como auxiliar administrativo, cuando no tiene la preparación profesional y mucho menos la experiencia.

“Con menos de un año laborando para la secretaría, sin cumplir con su horario de ocho horas diarias, ya fue dado de alta y gozará de un buen sueldo, cuando existen empleados con más de 5 años de antigüedad que no han recibido su plaza”, señaló la fuente, ante el malestar que generan estas acciones de los altos funcionarios de la Sesa.

Para esta acción, forzosamente estuvo relacionado el líder sindical, Barbaciano Sansores Matos, quien en su ambición por reelegirse, apoya estos favores “políticos”, que sólo muestran el tráfico de influencias en la Secretaría de Salud de Quintana Roo.

Cabe recordar que Eduardo García Girón fue presidente del Comité de Transparencia del Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos (IEEA), cuando la dependencia estaba a cargo de Rafael Quintanar González, cuando se destaparon corruptelas y desvíos de recursos, por lo que no sorprende que se vea involucrado en nuevas irregularidades en el servicio público.