Quintana Roo

Pocos visitaron las ruinas de Tulum

Por Romana Mora

 

TULUM, 21 de marzo.- Mientras que en la zona arqueológica de Tulum disminuyó el número de visitantes, las de Dzibilchaltún y Chichén Itzá son visitadas como parte del equinoccio de primavera, alcanzando visitas de alrededor de 2 mil 200 en el día, mencionó Alejandro Torres Perera, de la empresa Guías Fundadores.

El miércoles rondaba el número de visitantes entre los 3 mil a la ciudad amurallada, sin embargo, debido a que en Tulum no hay equinoccio, el jueves 21 de marzo disminuyó su arribo, luego que los visitantes, en su mayoría extranjeros, optaron por visitar las zonas arqueológicas de Dzibilchaltún y Chichén Itzá, ambas en el estado de Yucatán.

Torres Perera explicó que el jueves disminuyó el número de visitantes a la zona arqueológica, la única colindante con el mar Caribe, lo que atrae a turistas nacionales y extranjeros de todo el orbe, colocándola como la tercera más visitada, luego de Teotihuacán y Chichén Itzá, toda vez que realmente no hay equinoccio.

En cuanto a los índices de ocupación que estarán alcanzando los próximos días, mencionó que de acuerdo con pronósticos, a partir de la semana entrante, la cual considera la más dinámica del periodo, estarían rondando en un promedio de actividad de los 85 puntos porcentuales, enfatizó el entrevistado.

Algunos turistas que llegan por vez primera quedan maravillados por el encanto del sitio, otros que ya han visitado el sitio, pero que debido a los años que han pasado, igual quedan asombrados tras los cambios, la transformación de Tulum y de los servicios con los que actualmente cuenta.

Los turistas que visitan la ciudad amurallada tienen la opción de recorrer el sitio y luego refrescarse en las aguas del mar Caribe, al descender  por las escaleras de madera y llegar a la zona de playas o simplemente contemplar el paisaje natural en donde se funde el mar azul turquesa con la espesura de la selva colindante con las playas del Parque Nacional Tulum (PNT).

De acuerdo con los mismos prestadores de servicios, los turistas siempre se van satisfechos de haber visitado el mágico lugar, dispuestos a retornar de nuevo, a pesar que en muchos casos tienen que recorrer el camino de entrada a la taquilla, al verse rebasado el servicio de trenecitos, pero lo hacen debajo de la sombra del manglar, en la banqueta rústica elaborada, para que los miles de peatones recorran el lugar cotidianamente.