El cierre de las calles al frente del panteón “Colonia” mandó “a la tumba” la economía de los vendedores de flores, quienes aseguraron que no tienen ventas porque la gente no se acerca.
Estos comerciantes, que en estas épocas esperan el repunte de sus ventas, fueron castigados por la imprudencia de la Comuna que irresponsablemente actuó sin pensar en ellos.
Acorde a testimonios de varios vendedores que por temor a represalias omitieron sus nombres, no los consultaron cuando tomaron la determinación del cierre de la calles.
“Sólo nos vinieron a perjudicar, en la administración anterior no pasó esto, sólo cerraron un carril, pero como hicieron fraude para ganar los del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ahora se sienten con el poder de hacer lo que quieran”.
Insensibles
Mientras el espurio alcalde Oscar Román Rosas González construye una mansión -sólo una más de sus propiedades- en la comunidad de Oxcabal, lo que menos le importó fue cerrarnos las calles para que fluya la vialidad, narró una mujer que invirtió considerablemente en mercancía para este día.
A diferencia de años anteriores, cuando sólo se cerró la calle próxima al panteón, mientras que se dejó libre a la circulación el otro carril de lado del parque “Cervera Armas”.
Este año, de acuerdo a trabajadores del Ayuntamiento, consultados a las afueras del conocido “panteón viejo”, señalaron que el culpable del cierre de las calles fue el inexperto Salvador Palmer Chavarría, titular de la Dirección de Servicios Públicos.
La inexperiencia, ineptitud y falta de sensibilidad de Palmer Chavarría quedó patente con la decisión del cierre de la calle 47 en los cruces con 28 y a la altura de la 22 con 45.
Con este mal pensado movimiento para “controlar” el tráfico de personas y de vehículos, perjudicó a los floristas que no tendrán buenas ventas, como ellos mismos manifestaron.
(Texto: Agustín Ferrer /
Fotos: Antonio Maldonado)