El director de “Acción y Reacción: Ingeniería sociocultural”, Gabriel Cruz Zamudio, afirmó que es necesaria la responsabilidad social en la gestión cultural, es lo que pretendió explicar en el curso que impartió en El Claustro que concluirá el 31 de este mes.
“Por supuesto que la hay y se puede o no asumir, eso ya es de cada quien diría mi abuela, pero justo lo que pretende este curso es poner en la mesa que existe una responsabilidad social que tenemos que asumirla y por lo tanto, conocer algunas de las herramientas para llegar a ello”, destacó.
En entrevista con Por Esto!, mencionó que lo que va a presentarle a los campechanos es una embarrada, dado que hay carreras dedicadas a ese tema y por lo tanto, no pretende sustituir toda la información que la gestión genera.
Espera que el curso motive a los ciudadanos y a sus autoridades a generar una licenciatura en gestión cultural, dado que todavía falta mucho por trabajar en el estado sobre este tema.
“Campeche me parece un lugar increíble, su gente me parece increíble, pero me parece que hay que trabajar mucho todavía me di cuenta con el taller de creación de proyectos culturales en el trato, con las instituciones de que todavía hay que ir trabajando y justo que puedan asistir personas jóvenes y que ellos puedan en algún momento trabajar en el gobierno o de forma independiente, pero alrededor de la cultura podría ser un aliciente para que cambio ahí algo, un pequeño clic”, manifestó.
Cruz Zamudio declaró, que ya en el curso anterior explicó cómo se debe hacer un proyecto, por lo que ahora van a analizar el fenómeno de la gestión cultura qué significa esto para qué sirve y qué beneficios genera a la población.
Expresó que la gestión cultural siempre está ahí, se puede esquivar, porque siempre va a haber alguien en una comunidad que diga “vamos a organizar algo, una fiesta, un baile o las fiestas patronales, que requieren este tema”.
“Cualquier expresión cultural que requiera una preparación previa, ya está implicando la gestión cultural en distintos niveles; los niveles de un bailongo, son diferentes a los niveles de un festival internacional, requieren más cosas, pero en esencia es lo mismo, es el acercamiento de las expresiones culturales a la gente”, finalizó.
(David Burelo)