Habitantes de la calle 26 de la colonia Centro padecen un calvario ante la constante escasez de agua potable, pues deben esperar hasta dos semanas para contar con el suministro del vital líquido. Otra problemática es la inseguridad que prevalece en la zona; asaltos y robo de auto-partes son frecuentes por las noches.
Aún en el primer cuadro de la ciudad los ciudadanos padecen a causa de la inseguridad, la deficiencia en servicios públicos básicos como el suministro de agua potable y de calles dignas, ya que algunas albergan varios baches, como es el caso de la calle 26 por 27 y 29 en la colonia Centro.
Mientras algunos autos y transeúntes caminan por la angosta vía sobre la desgastada carpeta asfáltica, se observan enormes baches, justo a espaldas del edifico que alberga a la Casa de la Cultura.
Por las noches los vecinos prefieren la seguridad de sus hogares, ya que la inseguridad se apodera de la zona ante la falta de vigilancia, algunos de ellos ya han sido víctimas de los ‘amantes de lo ajeno’.
Tal es el caso del señor José Camas, a quien hace un mes lo asaltaron arrebatándole el fruto de su trabajo. “Sí está peligroso de noche, el otro día me robaron mi dinero. Me asaltaron como a las ocho de la noche, me dijeron ¿Qué llevas ahí? Me arrebataron mi mochila con mi dinero”.
De igual manera, el joven Carlos Beltrán manifestó “mi papá tiene un auto y ya lo han intentado abrir dos veces, por eso ya decidimos guardarlo en otro lado y estamos pensando en mudarnos”.
Sin embargo, no sólo la inseguridad aqueja a los colonos, pues la falta de agua potable es otra carencia que padecen diariamente. “No hay agua, sólo llega en las madrugadas y a veces pasan dos o tres semanas sin que tengamos una sola gota”, explicó Beltrán.
Ante dicha situación, los habitantes de la calle 26 tienen que recurrir a la compra de pipas o garrafones de agua potable, los cuales les permitan realizar sus actividades higiénicas y las propias del hogar.
(Texto: Diana Bravo Carrillo/
Fotos: Ignacio Morales)