En la desesperanza se encuentran los restauranteros del balneario de La Manigua, quienes aseguran viven relegados por los gobiernos Estatal y Municipal, pues no han recibido apoyo alguno y únicamente los voltean a ver para cobrarles impuestos y permisos.
Sin atención por parte de las autoridades estatales ni municipales, los restauranteros del balneario de La Manigua se hayan en el olvido y resignados a continuar laborando en las mismas condiciones que hasta ahora.
A pesar de las afectaciones y caída en el consumo que provocó la Reforma Energética, aprobada a su paso por la Cámara de Senadores y Diputados por Rosas González y Moreno Cárdenas, los locatarios reprobaron la falta de sensibilidad del actual Gobierno, que únicamente vio la oportunidad para aumentarles el costo de múltiples permisos y gravámenes.
Los vendedores, que por temor a represalias solicitaron mantener su identidad en el anonimato, explicaron que tal y como ocurrió en la pasada Fiesta del Mar, no esperan que las cosas cambien en las próximas festividades julianas, ya que a la fecha no ha habido acercamiento por parte de las autoridades.
“Existe un marcado desinterés en materia de promoción turística, tanto por parte del Alcalde como del Gobernador, ya que prefieren promover su imagen a la de la Isla y mucho menos a nuestro balneario”, comentó uno de los restauranteros.
Visiblemente molestos por el mal trato que han recibido, añadió que dicha zona de la Isla no es del interés de ningún Gobierno Municipal; sin embargo, la situación cambia cuando se trata de cobrar impuestos.
Los entrevistados lamentaron la falta de visión y difusión a los diversos espacios naturales del Municipio de Carmen, así como el desaprovechamiento del potencial turístico que éstos poseen. “No hay interés, porque tienen otras prioridades. Seguramente regresarán en campaña y ahí nos vamos a ver las caras de nuevo”.
(Texto y fotos: Redacción /
POR ESTO!)