Campeche

En estado de alerta

SEYBAPLAYA, Cam., 27 de julio.- “De ninguna manera se permitirá que se realicen acciones que atenten contra el medio ambiente en Seybaplaya. Nuestro litoral no será un depósito de chatarra”, declaró el dirigente pesquero Manuel Jesús Mut Cutz, luego de que se diera a conocer la intención de la empresa Oceanografía S.A. de desguazar en el litoral seybano el barco Caballo Azteca.

“Ni siquiera se ha resuelto lo concerniente a la inseguridad que prevalece en altamar, cuando ya nos trajeron un nuevo problema”, acusó Mut Cutz, quien a la vez aseguró que lo que hasta el momento saben es que el barco Caballo Azteca fue remolcado ilegalmente hasta Seybaplaya.

Sin embargo, el veterano pescador se mostró un tanto suspicaz respecto a que las autoridades desconocen las maniobras que se realizan en el puerto de Seybaplaya, pues dijo que las Capitanías de Puerto llevan un registro de despachos marítimos.

Abundó que en la maniobra de remolque del Caballo Azteca, por lo menos, participaron dos buques más: los remolcadores, que también debieron de reportar su arribo al puerto de Seybaplaya.

Barco encallado

Por lo pronto, la presencia del buque propiedad de Oceanografía S.A. comenzó a incomodar a los pescadores ribereños de Seybaplaya, sobre todo porque en los últimos lustros han vivido las consecuencias del impacto ecológico negativo generado por la construcción de los muelles de la Administración Portuaria Integral de Campeche (Apicam) y de la empresa Montserrat Sand.

Los hombres de mar aseguran que durante los días jueves y viernes, los remolcadores trataron de arrastrar el enorme buque lo más cerca del muelle de la cementera Montserrat, pero no lograron su cometido, pues en la zona no hay suficiente calado.

¿Y el permiso para

remolcar al Caballo?

También está establecido en la Ley de Navegación que para remolcar un navío o barcaza también se debe solicitar el permiso correspondiente ante la Semar y cumplir una serie de requisitos que van desde proporcionar el nombre del solicitante, el punto de partida, el trazo de la ruta a seguir y el sitio donde finalmente será atracado o fondeado el barco o artefacto naval.

El buque Caballo Azteca fue remolcado desde las playas de Sabancuy hasta Seybaplaya, cubriendo una distancia de 90 kilómetros aproximadamente, en un área que es transitada por buques pesqueros y de servicios a la industria petrolera, por lo que es de suponerse que de esta maniobra fueron informadas las autoridades competentes.

Autoridades deben estar

enteradas del remolque

En teoría, las Capitanías de Puerto de Ciudad del Carmen y Seybaplaya, así como la Secretaría de Marina (Semar), deben estar enteradas de las maniobras de remolque del buque de Oceanografía y es precisamente la segunda institución en mención la que, además, debe expedir el permiso correspondiente para el desguace del buque de más de 10 mil toneladas de peso bruto.

Según la legislación vigente, todo aquel interesado en desguazar deberá hacer la solicitud correspondiente ante la Semar y la Capitanía de Puerto, misma que deberá contener el nombre del solicitante, denominación o razón social de quienes promuevan; en caso de representante legal, señalar su nombre, domicilio, Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y Clave Unica de Registro de Población (CURP).

En la formulación de la petición de desguace, el contribuyente deberá expresar los hechos o razones que dan motivo a la misma. Asimismo, el documento debe llevar la firma autógrafa del interesado o su representante legal. En caso de que el interesado o el representante legal no puedan firmar, deberán imprimir la huella digital de su pulgar.

Como es de suponerse también se deberá expresar el nombre, dirección y teléfono de la persona que se hará cargo de los trabajos de desguace y el lugar donde se realizará, así como la ubicación y los datos generales de la embarcación que se pretende desguazar: nombre, bandera, unidades de arqueo bruto, etc.

Por si fuera poco, la ley exige que el dueño del barco anexe a su petición el documento que compruebe la garantía financiera o la póliza de seguro con cobertura suficiente de garantía para cubrir los gastos que pudieran originarse por daños y perjuicios a las vías navegables, a instalaciones portuarias y al medio marino; gastos por salvamento de la embarcación o la recuperación de sus restos, así como los derivados de la limpieza del área donde se efectúe la operación.

Se organizará

frente pesquero

De confirmarse que el buque Caballo Azteca será desguazado en el litoral seybano, las organizaciones que pertenecen al Frente Común de Pescadores se reunirán para acodar qué tipo de acciones llevar a cabo ante la inminente amenaza al ecosistema y a la actividad pesquera, afirmó el dirigente Mut Cutz.

El veterano pescador declaró que por lo pronto ya fue confirmada la presencia del barco frente al muelle de Montserrat y que en los últimos días se han estado realizando maniobras que podrían estar causando severos daños a un área de arrecife donde se reproduce el pulpo.

Desguace, trabajo peligroso

Respecto a los riesgos que conlleva una operación de desguace, ex trabajadores de Oceanografía explicaron que el desmantelamiento de un buque es un proceso difícil debido a la complejidad estructural de los navíos y de los muchos temas que tratan del medio ambiente, de la seguridad y de la salud.

El desguace del buque expone a trabajadores a una gran gama de peligros, de actividades o condiciones en el lugar de trabajo que conllevan lesiones o enfermedades.

Durante el desarme de un buque se expone a los trabajadores al asbesto contenido en revestimientos de suspensión, aislamiento, telas encima del aislamiento, cables, forros, tuberías y el casco.

Quienes participan en los trabajos de desguace también son expuestos a los denominados bifénilos policlorados, que están contenidos en productos tales como la goma de mangueras, el aislamiento de espuma de plástico, la pintura plata, la pintura de zonas habitables, el fieltro debajo de las placas insonoras y la pintura primaria del casco de acero.

Otro material peligroso con los que entran en contacto los trabajadores es el plomo, proveniente de la pintura con plomo o cromato, lastres hechos con el mencionado material, pilas, generadores y componentes de motores.

Combustible y residuos en sentinas

El líder pesquero Mut Cutz consideró que si el dueño del buque cuenta con los permisos correspondientes para desguazarlo no debería actuar como lo ha hecho hasta el momento.

“Lo que se ha dicho es que el barco fue traído en forma ilegal, porque el dueño no quiere que se remate para que sea cubierta una deuda que tiene con sus trabajadores. Entonces estamos ante un empresario que no es confiable y que seguramente no se apegará a la normatividad.

“La costa de Seybaplaya está sufriendo graves problemas ambientales y no podemos permitir que, de pronto, una empresa irresponsable venga a derramar miles de litros de diesel, aceite y otras sustancias nocivas que seguramente están contenidos en los depósitos de combustible y sentinas de la embarcación”, concluyó.

(Joaquín Vargas Aké / Fotos: Martín Rivero)