
Luego de más de 80 horas de cierre total en la carretera federal 180, elementos antimotines de la Secretaría de Seguridad Pública se movilizaron este jueves hacia la Península de Atasta y la comunidad de Nuevo Progreso, con el objetivo de liberar el bloqueo carretero que ha generado afectaciones severas al tránsito vehicular y a la economía regional.
El bloqueo, iniciado la mañana del domingo, es encabezado por habitantes de comunidades como San Antonio Cárdenas, Nuevo Progreso y otras localidades cercanas, quienes exigen la construcción inmediata de una subestación eléctrica por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), una obra que aseguran ha sido prometida por años sin resultados.
Durante las jornadas de cierre, largas filas de vehículos, incluidos automovilistas, transportistas y turistas, han permanecido varados en ambos sentidos de la vía que conecta Ciudad del Carmen con el estado de Tabasco, afectando la movilidad, el abasto de alimentos y servicios y el funcionamiento de pequeños negocios.
La tarde de este jueves, al agotarse los intentos de diálogo, fue ordenado el despliegue de fuerzas antimotines, quienes, según fuentes oficiales, actuarán bajo protocolos de contención para evitar confrontaciones y restablecer el flujo vehicular.
Aunque no se han reportado enfrentamientos, se mantiene un ambiente de tensión entre los manifestantes, quienes reiteran que no se retirarán hasta recibir un compromiso formal y documentado por parte de las autoridades federales y estatales.
La situación permanece en desarrollo, y se exhorta a la ciudadanía a tomar rutas alternas y evitar circular por la zona hasta nuevo aviso.