De nueva cuenta la población fue la responsable de que una tortuga carey adulta no pudiera realizar el proceso de anidación en Playa Norte y es que mientras el quelonio salió del mar en busca de playa para cavar el lugar donde depositaría sus huevos, esta fue filmada y fotografiada con flash, pero además de ser rodeada de forma irresponsable le echaron agua.
Así lo señaló, Tomás Ávila Argáez, presidente del Grupo Ecológico “Isla de Tris”, al recordar que a finales de mayo pasado, durante un mismo fin de semana se reportó que al menos dos quelonios no habían podido desovar por el ‘acoso’ del que fueron víctimas cuando salieron del agua, en busca de playa para depositar sus nidos yes que, en esa ocasión una tortuga salió cuatro veces, pero que la gente hasta con perros, estuvo ahí a sus alrededores, impidiéndole ese proceso.
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Lamentó que pese a que todos los años este tema es recurrente, la noche del pasado viernes, no solo el estrés que provocaron los ciudadanos que la vieron salir del agua, sino también la irresponsabilidad e inconsciencia de uno que fue por una cubeta y la llenó de agua de mar para vaciársela encima, en completa ignorancia que la tortuga solo quería estar sola para poder anidar.
Ávila Argáez dijo que la conducta de algunos ciudadanos, lejos de contribuir a la preservación de la especie, solamente evitan que los quelonios se sientan en confianza, al contrario, se sienten amenazados, porque la rodearon, la siguieron, le pusieron el flash de sus equipos telefónicos, cuando ellas, justamente hacen este proceso en las noches y madrugadas para evitar ser depredadas ellas o sus huevos.
Para el presidente del Grupo Ecológico “Isla de Tris”, ahora no solo se tendrán que poner letreros de que no pasen vehículos todoterreno a la orilla de la playa, sino que se tendrán que poner avisos por todos lados, para evitar que sigan repitiendo este patrón de tener que acosarlas cuando lo único que buscan es un lugar idóneo para depositar sus huevos.
Después de este hecho al que llegaron elementos de Protección Civil, el equipo de Ávila Argáez, continuó con el rondín nocturno, desafortunadamente la tortuga carey adulta no volvió a salir del mar para buscar desovar. Reiteró que, mantendrán las acciones de vigilancia en busca de registrar los eventos de anidación y proteger a las hembras, aunque la falta de conciencia social continúa siendo una amenaza constante.