Conrado Roche Reyes
Joselito Adame (José Adame Montoya) nació un 22 de marzo de 1989 en la Ciudad de México. Su familia es de raigambre taurina, ya que es sobrino del fallecido matador de toros Efrén Adame, aquel que causara sensación en su presentación como novillero en la Plaza de Toros México por su gran parecido con el diestro, por entonces el mandón de la fiesta, Manuel Benítez “El Cordobés”, pero que, además de la curiosidad de verlo (realmente parecía su doble), era un buen torero, valiente como el que más y con cierta dosis de clase. Ha sido uno de los poquísimos diestros que de novilleros ha llenado la Plaza México.
Joselito, viendo las pocas oportunidades que existían y existen en México para los novilleros, desgraciadamente, viajó a España, en donde se puede decir fue allí donde fue forjando su carrera taurina. Fue alumno de la Escuela Taurina de Madrid.
Después de deslumbrantes triunfos como novillero (debutó con picadores en Millas, Francia) para posteriormente tomar la alternativa en la prestigiosa Plaza de Arles, siempre en el país galo, actuando de padrino “El Juli” y de testigo Juan Bautista, cortando una oreja al de la alternativa y dos a su segundo. Esto le abrió las puertas de la catedral del toreo mundial, la plaza de Las Ventas de Madrid, en donde confirma su alternativa en el año 2011 con Sebastián Castella de padrino y Perera de testigo, con toros de Alcurrucén.
Joselito Adame es un torero de un enorme valor, gran entrega en todas sus tardes (aquí en nuestra Plaza lo ha demostrado y el año que acaba de terminar fue declarado triunfador de la temporada en la Plaza México). Hoy día es considerado la primera figura del toreo en México y es quien más festejos tiene en su haber, y de los mexicanos en España es quien más corridas acumula. Es un torero muy interesante. No se deja ganar la pelea por nadie. El torero va en evolución continua, afinando cada vez más su toreo que inició siendo su principal argumento la valentía. Hoy se puede decir que atesora y, últimamente, ha aflorado una clase que ni el mismo sabía que atesoraba. La prueba es que ha gustado mucho al exigente público de Madrid y en México, como antes dijimos, es el máximo triunfador.
Habiéndose formado como torero en España, Adame sabe lo que es aquello. Allí es una competencia atroz, con bureles de gran envergadura, mucho trapío y embestidas secas. Sin embargo, triunfó en la madre patria habiendo sido personaje indispensable en las últimas ediciones de la Feria de San Isidro en Madrid.
Ya con este bagaje, se puede considerar, aunque aún es joven, como un ejemplo a seguir a los aspirantes a toreros. El riega los ruedos, cualquiera que este sea, con su arte y valor, no se arredra ante nada ni ante nadie. Ha alternado algunas ocasiones con Ponce y jamás ha sido borrado. Incluso ocasiones ha habido en las que Joselito a salido triunfador y en hombros de los aficionados.
El sabe de la responsabilidad que implica torear en nuestra Plaza, sabe que aquí sí sale el toro y en sus anteriores actuaciones se ha justificado plenamente. Por lo que esperamos con ansias esta corrida, este espectacular mano a mano en la conmemoración del Noventa Aniversario de nuestra querida y torera placita. El día 27 de enero, la cumpleañera escuchará y vibrará con los estentóreos ¡oles! de la afición, de eso estamos seguros. Mejor regalo no se le pudo hacer a la Mérida con este grandioso cartel.
Adame es un buen torero a la verónica y efectúa variados y vistosos quites, con la muleta es un señor torero tanto al natural como con la derecha y matando, es un excelente ejecutante del volapié.