CANCUN, Q. Roo., 12 de junio (ESPECIAL/Juan Diego Casanova Medina).- Un quinto lugar en la Zona Sur no es el ideal, lo que no estaba entre los planes del equipo al iniciar la temporada. Cuatro puntos es la cifra para lo único que les alcanzó a Leones de Yucatán tras una primera vuelta gris, el reflejo de un deficiente desempeño que los acompañó a lo largo de los primeros 60 partidos.
Los Leones de Yucatán ganaron 7x3 a los Tigres de Quintana Roo, con el que rescataron el último de la serie y evitaron la humillante barrida, pero de nada les sirvió porque los Bravos de León no dejaron salir vivos a los Diablos Rojos del México y “La Fortaleza” fue su bastión donde aseguraron el cuarto lugar que dejó escapar el conjunto melenudo semanas atrás.
En descargo de las fieras que se ubicaron a medio standing de la Zona Sur, es que defendieron a “morir” el quinto lugar con los Tigres que requerían ganar la serie por limpia para tumbar de esa posición a la novena yucateca.
Los Leones terminaron en el sitio que les corresponde. Con 26 victorias a cambio de 32 derrotas no pueden aspirar a algo más allá de sus posibilidades que la frialdad de las estadísticas determinó.
Un lujo desperdiciado tener a los tres mejores lanzadores en efectividad si el equipo está destinado a pelear los lugares de media tabla para abajo.
Por primera vez en la serie en el “Beto Ávila”, el cubil de los Tigres de Quintana Roo en Cancún, al que asistieron 6,277 aficionados en el último compromiso de esta primera etapa de la campaña, el anfitrión tomó la delantera.
El que puso adelante al equipo bengalí fue el ex melenudo dominicano Rubén Sosa, quien al primer lanzamiento de su ex compañero, el diestro texano Jesse Estrada, lo sacudió con brutal trancazo por el izquierdo, donde desapareció la pelota para su quinto jonrón de la temporada.
Sin embargo, la fiereza de los reyes de la selva apareció en el segundo episodio, en el cual inició el festín con el que remontaron la desventaja inicial. Del total de 16 jits que enmarcó el ataque melenudo, 14 se repartieron en las primeras cuatro entradas y la mitad de ellos le dio forma a la ofensiva de 5 carreras con el que puso tierra de por medio.
La pesadilla para el derecho venezolano Wilfredo Boscan (2-2), el derrotado, comenzó
después de retirar los primeros dos tercios del segundo inning. No sintió lo duro sino lo tupido al ser castigado con 5 imparables consecutivos, el primero de ellos, fue el octavo jonrón de Leo Heras, su tercero en dos juegos seguidos y el último sencillo de Jorge Flores, lo despidió del juego.
El mochiteco Sebastián Valle, quien bateaba como sexto en la alineación, fue bajado a noveno en el line-up y disparó un par de jits en cuatro turnos, con una base por bolas. Con su primer incogible, remolcó dos carreras, imparable de Flores impulsó la cuarta carrera y ante los disparos del sonorense Javier Solano, quien relevó a Boscan, el veracruzano Héctor “La Vieja” Hernández, en su reaparición, cerró la cuenta.
En los siguientes dos episodios, los Leones siguieron atacando el pitcheo bengalí y se alejaron 7x1. Valle remolcó su segunda carrera en la tercera tanda y el culichi Luis Felipe “Pepón” Juárez, con su segundo sencillo de la noche, produjo una en el cuarto rollo.
Adán Muñoz le aplicó la grúa a su relevista y trajo al capitalino Marco Quevedo, quien permitió el jit 14 de los rugidores que disparó Leo Heras. Seguía el dominicano Alex Valdez, a quien colocaban de tercero en la alineación y anoche bateó como séptimo y ya tenía un par de jits.
Por lo tanto, el manager del equipo cancunense ordenó la base intencional para llenar de fieras los senderos y la estrategia funcionó ya que el michoacano José Juan Aguilar rodó al campo en corto donde inició la espectacular doble matanza que terminó con la amenaza.
Raúl Barrón y Juan Cosío, con sendos jits en su labor, le colgaron a las fieras las últimas dos argollas.
Los Tigres atacaron a Estrada en el fondo del cuarto episodio. El colombiano Reynaldo Rodríguez conectó su tercer doble de la temporada y timbró con el primero jonrón del cubano Yordany Linares que puso el juego 7x3 y con este marcador concluyó el partido con la cuarta victoria para Jesse Estrada, que sigue invicto. Completó su labor en 5 entradas con 3 carreras, 4 jits, una base por bolas, un error con 5 ponches.
El zurdo Manny Parra domesticó a los Tigres en los siguientes tres episodios y el venezolano Ronald Belisario bajó la cortina de la novena entrada en riguroso orden.
Después del Juego de Estrellas en el nuevo “infierno” de los Diablos Rojos del México, se reanuda la segunda vuelta hasta el próximo 21 de junio cuando los Leones reciban en serie de fin de semana a los Algodoneros de Unión Laguna.