El Estadio Tamaulipas vivió una noche histórica cuando Jaiba Brava del Tampico-Madero se coronó campeón del Torneo Apertura 2025 de la Liga de Expansión MX tras vencer 1-0 a Irapuato con un penal al minuto 85 ejecutado por Alonso Escoboza, cerrando así una campaña prácticamente perfecta y borrando las amarguras de finales anteriores.
Bajo la dirección del estratega local Gastón "Chima" Ruiz, el conjunto celeste levantó el trofeo frente a su afición en un Estadio Tamaulipas que vibró desde el calentamiento hasta el pitazo final, escribiendo una página dorada en la historia del club tampiqueño.
Una final con historias diferentes
El partido de Vuelta de la Gran Final llegó con el marcador global en ceros tras el empate sin goles en el encuentro de ida disputado en territorio guanajuatense. Ambos equipos arribaron al duelo definitorio con narrativas contrastantes:
Desde el primer minuto, el Estadio Tamaulipas se convirtió en un caldero hirviente. Los cánticos de la afición local prácticamente ahogaron la voz del reducido pero fiel grupo de seguidores freseros que nunca dejó de alentar a su equipo.
Ambos conjuntos desplegaron su mejor futbol ofensivo, generando opciones de peligro en ambas porterías. Sin embargo, las sólidas defensas mantuvieron el marcador en ceros durante los primeros 45 minutos, dejando todo por definirse en el complemento.
Las dos escuadras completaron una campaña casi perfecta durante la temporada regular y las fases finales, pero sabían que nada de eso valdría si salían del estadio con las manos vacías.
Segunda parte: Jaiba Brava toma el control
En la parte complementaria, el conjunto celeste intensificó su propuesta ofensiva. Jaiba Brava generó las llegadas más claras del encuentro, arrinconando a un Irapuato que resistía con orden defensivo pero que comenzaba a mostrar señales de cansancio.
Los minutos transcurrían y la tensión aumentaba. Cada llegada de los locales era acompañada por el rugido de la afición, mientras que los freseros se aferraban a su solidez defensiva esperando llegar a la tanda de penales.
Cuando el cronómetro marcaba el minuto 85 y parecía que todo se definiría desde los once pasos, ocurrió la jugada que cambiaría la historia. Una falta sobre Alonso Escoboza dentro del área fue señalada como penal por el árbitro central.
El Estadio Tamaulipas estalló en un rugido ensordecedor. Los aficionados sabían que el título estaba a un tiro de distancia. El sinaloense Escoboza, sin titubear, tomó el balón y se plantó frente al punto de los once pasos.
Con una ejecución impecable, el mediocampista convirtió la pena máxima en gol, desatando la locura total en las gradas. El tanto significó el título para la Jaiba Brava del Tampico-Madero, que minutos después levantaría el trofeo de campeón del Apertura 2025.
El estratega tampiqueño Gastón "Chima" Ruiz cumplió el sueño de dirigir a su equipo hacia la gloria máxima. Su planteamiento táctico, su manejo del grupo y su capacidad para manejar la presión de una final en casa fueron determinantes para el título.
Chima Ruiz se convierte así en uno de los técnicos más exitosos en la historia reciente del club, entregándole a la afición el primer campeonato tras años de espera y frustraciones en finales anteriores.
Aunque el Club Deportivo Irapuato no pudo llevarse el título en su primera final, su participación en la Liga de Expansión MX representa un logro histórico. El equipo guanajuatense demostró calidad, organización y competitividad a lo largo del torneo.
Los freseros regresan a casa con la frente en alto, sabiendo que disputaron la final deportivamente y que el futuro del club pinta prometedor tras este debut destacado en la división de plata.
La Jaiba Brava cerró una campaña memorable con el título que sus aficionados tanto anhelaban. El equipo celeste dejó atrás las amarguras del pasado, las finales perdidas y las oportunidades desperdiciadas para escribir su nombre en letras doradas en la historia de la Liga de Expansión MX.
El Estadio Tamaulipas fue testigo de una celebración épica cuando el árbitro pitó el final del encuentro. Jugadores, cuerpo técnico y afición se fundieron en un abrazo colectivo que selló una noche que quedará grabada para siempre en la memoria del futbol tampiqueño.
Para la afición celeste, este campeonato representa mucho más que un trofeo. Es la reivindicación tras años de decepciones, es la recompensa a la fidelidad inquebrantable, es la prueba de que la persistencia y la fe en el proyecto finalmente dan frutos.
Tampico-Madero puede presumir ahora de ser campeón de la Liga de Expansión MX, un título que refuerza el prestigio del club y que sienta las bases para aspirar a objetivos aún más ambiciosos en el futuro.
El futbol mexicano tiene un nuevo campeón, y lleva el nombre de Jaiba Brava del Tampico-Madero.