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EE.UU.: Cierre administrativo durará hasta 2019

WASHINGTON, EE.UU., 27 de diciembre (EFE/AFP/REUTERS).- Las acciones que tomaron hoy el presidente estadounidense, Donald Trump, y el Congreso apuntan a que el cierre parcial de la Administración durará hasta principios de 2019, como mínimo, cuando los miembros del Senado volverán a reunirse para abordar la cuestión.

“El presidente (Trump) no quiere que el Gobierno permanezca cerrado, pero no firmará una propuesta que no priorice primero la seguridad de nuestro país”, indicó la Casa Blanca en un comunicado, después de que el propio Trump cargara contra los demócratas por no apoyar la construcción de un muro fronterizo con México.

La oficina presidencial argumentó que Trump y su equipo “se quedaron en Washington durante la Navidad con la esperanza de negociar un pacto para reabrir la Administración”, pero recriminó a los demócratas que “decidieran irse a casa”.

La actitud inamovible de Trump ha chocado desde hace seis días con el Senado estadounidense, que no ha logrado alcanzar un pacto que satisfaga al mandatario y que, por ende, reabra las partes de la Administración que han cerrado.

De este modo, la Cámara Alta estadounidense anunció hoy que no ha llegado a un acuerdo en las últimas horas y comunicó que sus integrantes no volverán a reunirse hasta el 2 de enero.

El mandatario exige que la ley de presupuesto asigne 5,000 millones de dólares para financiar el muro fronterizo con el que busca impedir la inmigración ilegal en la frontera con México, una propuesta central de la campaña electoral que lo llevó al poder.

Hasta enero

“El Senado permanecerá suspendido hasta el lunes 31 de diciembre, cuando habrá una sesión pro forma (en latín, para la forma, es decir, para guardar las apariencias). El Senado volverá a reunirse el miércoles 2 de enero a las cuatro de la tarde”, anunció el único senador que asistió este jueves a la Cámara Alta, Pat Roberts.

Por otro lado, el congresista republicano Mark Meadows, cercano a Trump y que sonó como candidato a ser su nuevo jefe de Gabinete tras el anuncio de la salida de John Kelly, vaticinó hoy que el Gobierno podría estar frente a un “cierre de Administración de larga duración”.

“Las negociaciones no han progresado en los últimos días. Los demócratas están convencidos de que no habrá dinero para el muro y ese es el problema”, sentenció Meadows en declaraciones a la cadena de televisión CNN.

La clausura del Gobierno federal es parcial porque tres cuartas partes de la Administración -incluido el Pentágono- tienen fondos hasta septiembre de 2019.

Tercer cierre

De hecho, la Oficina de Gestión de Personal (OPM, por su sigla en inglés) del Ejecutivo envió hoy cartas a sus empleados para que puedan justificar sus impagos de créditos, hipotecas o alquileres que puedan surgir por culpa del cierre parcial de la Administración,

La agencia gubernamental proporcionó una misiva de muestra a los trabajadores afectados para que puedan comunicarse con las entidades que esperan un pago regular y explicarles que no pueden hacerse cargo hasta que no cobren su nómina.

El cierre de la Administración se prolongará así hasta enero, cuando los demócratas, gracias a su nueva mayoría, tienen previsto asumir el control de la Cámara Baja y podrían aprobar una financiación de la Administración sin destinar fondos para el muro anhelado por Trump.

Este es el tercer cierre que afronta Trump desde que llegó al poder a principios de 2017. El primero se produjo en enero de este año, coincidiendo con su primer aniversario en la Casa Blanca, y se alargó durante tres días; mientras que el segundo fue en febrero y duró apenas unas horas.

Acusa a demócratas

El presidente estadounidense, Donald Trump, acusó hoy a la oposición demócrata de provocar el cierre parcial de la Administración, que entró hoy en su sexto día, al “obstruir” la construcción del muro en la frontera con México.

En su tuit de hoy, el mandatario aseguró que la bancada demócrata está “obstruyendo” la construcción de un muro fronterizo “que se necesita desesperadamente” y señaló que los agentes fronterizos quieren que se levante esa pared en el linde sur del país.

Trump hizo estas declaraciones poco antes de que el Senado estadounidense se reúna hoy para tratar de llegar a un acuerdo que reabra parte de la Administración federal, que lleva seis días cerrada.

A principios de año se dieron negociaciones en ambas cámaras del Congreso para incluir una solución permanente para los cientos de miles de jóvenes indocumentados amparados por el programa migratorio Acción Diferida (DACA) a cambio de financiación para el muro.

Sin embargo, un fallo judicial congeló la cancelación de ese programa por parte de la Administración Trump y obligó al Gobierno estadounidense a mantenerlo abierto.

Culpan a Trump

Más estadounidenses responsabilizan al presidente Donald Trump que a los legisladores demócratas por la paralización parcial del gobierno federal de Estados Unidos, mostró un sondeo de Reuters/Ipsos publicado el jueves, en momentos en que no se ve una solución rápida a la disputa.

Un 47% de los adultos consideraron que Trump era responsable de la paralización, mientras que un 33% culpó a los demócratas en el Congreso, según el sondeo realizado entre el 21 y 25 de diciembre, mayormente después del inicio de la suspensión de actividades.

Un siete por ciento dijo que el problema se debía a los legisladores republicanos.

La paralización ocurrió luego de que Trump exigió al Congreso que destinara 5,000 millones de dólares de los contribuyentes para ayudar a financiar un muro que quiere levantar en la frontera con México, algo a lo que se oponen los demócratas y algunos republicanos. El costo total estimado del muro es de unos 23,000 millones de dólares.

Sólo un 35% de los consultados en el sondeo Reuters/Ipsos dijo que apoyaba incluir dinero para el muro en el proyecto de ley de gasto del Congreso.

Apenas un 25% dijo que respaldaba la decisión de Trump de paralizar parcialmente al gobierno federal por el tema.

Tarea pendiente

El Gobierno de EE.UU. termina el año con la tarea pendiente de reunir con sus familias a todos los niños migrantes que fueron separados en la frontera, que según los últimos datos fueron 2,816, en medio de un alto en el proceso legal abierto por dicha separación debido al cierre parcial del Gobierno.

El juez Dana Sabraw, quien preside en una corte del sur de California el litigio colectivo presentado en nombre de las familias afectadas por la separación, accedió hoy a una petición de los abogados del Departamento de Justicia para aplazar los plazos relacionados con el caso “hasta nuevo aviso”.

La entrega por parte del Gobierno de los reportes sobre el avance del proceso de reunificación familiar, que normalmente se presentaban cada dos semanas, también quedó aplazada hasta que se resuelva el tema presupuestario en el Congreso.

“Los abogados del Departamento de Justicia tienen prohibido trabajar, inclusive de forma voluntaria”, recalcó el equipo legal de la Administración federal al solicitar el aplazamiento.

Las críticas entre los contrarios a la separación de familias de migrantes no se hicieron esperar.

La implementación de la política de “tolerancia cero” contra la inmigración irregular por parte del Gobierno de Trump derivó este año en la separación de miles de familias que llegaron a la frontera Sur, principalmente en búsqueda de asilo político.