LAUSANA, Suiza, 9 de agosto (EFE).- Jóvenes de todo el mundo, entre ellos la activista sueca Greta Thunberg, marcharon hoy viernes por las calles de Lausana para pedir más acción de los gobiernos para combatir el calentamiento global, un día después de que la ONU pidiera cambios en el consumo alimentario para ayudar en esa lucha.
Unos 2500 jóvenes, según los cálculos de la policía local, se unieron a la manifestación de hoy, que partió de la estación de tren en el centro de la ciudad suiza y terminó a orillas del lago Lemán, cerca de donde se encuentra la sede del Comité Olímpico Internacional.
Durante hora y media los jóvenes atravesaron importantes avenidas de la urbe coreando lemas como “somos imparables, otro mundo es posible” y portando pancartas que, en diversos idiomas, mostraban mensajes del tipo “cambiemos el sistema, no el clima”, “es ya la hora, porque el mundo se muere” o “no hay un planeta de repuesto”.
“No tendríamos que estar aquí”, rezaba otra de las pancartas que portaba una adolescente, haciéndose eco del mismo mensaje que ha transmitido Thunberg en anteriores ocasiones, el de que la inacción de los adultos ha obligado a niños y adolescentes a iniciar este tipo de huelgas para concienciar sobre el grave problema.
Thunberg estuvo presente en el inicio de la manifestación, con su ya icónica pancarta de cartón en sueco “skolstrejt for klimatet” (huelga escolar por el clima), pero no intervino públicamente ni estuvo durante toda la marcha, ya que partió hacia Londres para iniciar la siguiente etapa de su ambiciosa gira mundial.
En la capital británica le espera el “Malizia II”, barco velero impulsado con energía solar y capitaneado por Pierre Casiraghi, destacado miembro de la aristocracia monegasca, con quien planea atravesar el Atlántico y arribar a Nueva York para la cumbre climática que se celebrará en septiembre en la sede de la ONU.
Thunberg destacó en su cuenta de Twitter que con la protesta de hoy ya son 51 las semanas en las que, al principio diariamente y más tarde con periodicidad semanal, inició una huelga estudiantil que ha inspirado a jóvenes de todo el mundo y le ha valido una nominación al premio Nobel de la Paz por parte de parlamentarios noruegos.