Una madrugada caótica se vivió este sábado 19 de julio en East Hollywood, Los Ángeles, cuando un automóvil Nissan Versa arrolló a un grupo de personas que esperaba ingresar a un club nocturno sobre el bulevar de Santa Mónica, dejando un saldo preliminar de 28 personas heridas, varias de ellas en estado crítico.
De acuerdo con el Departamento de Bomberos de Los Ángeles, más de 100 elementos de emergencia respondieron al siniestro, atendiendo a tres personas en condición crítica, seis en estado grave y otras 19 con lesiones menores. La mayoría de los afectados son mujeres, según detalló el capitán Adam van Gerpen.
El vehículo también impactó contra un puesto de tacos ubicado en la misma zona, reconocida por su vida nocturna y su cercanía con puntos emblemáticos como el Sunset Boulevard y el Paseo de la Fama.
Las primeras versiones indicaban que el conductor habría perdido el conocimiento, lo que derivó en la pérdida de control del automóvil.
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No obstante, las autoridades encontraron una nueva línea de investigación tras detectar que una de las personas heridas tenía un impacto de bala.
El sargento Travis Ward, del Departamento de Policía de Los Ángeles, confirmó que el conductor —también lesionado— habría sido baleado tras embestir a la multitud.
Fue trasladado a un hospital en donde permanece bajo observación médica, impidiendo hasta ahora determinar si estaba intoxicado o si el atropello fue intencional.
“La investigación será extensa”, anticiparon las autoridades, quienes aún no descartan ninguna hipótesis. La zona permanece resguardada mientras se recaban evidencias que permitan esclarecer uno de los episodios más impactantes ocurridos recientemente en el corazón de Hollywood.
IO