La Fundación Michou y Mau para Niños Quemados dio a conocer una actualización médica relevante sobre las personas afectadas por el accidente aéreo de la Secretaría de Marina (Semar) ocurrido en Galveston, Texas.
De acuerdo con la organización, Julia Aracelis Cruz, madre del menor que perdió la vida tras el desplome de la aeronave, ya fue extubada y su estado de salud es estable.
La información fue confirmada a través de un comunicado oficial, en el que se detalló que el director médico de la fundación, Yannick Nordin, viajó a Galveston para acompañar a la familia del menor y dar seguimiento directo a la atención hospitalaria de los sobrevivientes.
Atención médica a sobrevivientes del accidente
Durante su estancia en Galveston, Nordin visitó a Julia Aracelis Cruz en compañía de Sky Decker, un habitante de la zona que se lanzó al agua tras el accidente para auxiliar a las víctimas y ayudar a salvarle la vida. La fundación destacó este acto como clave en la atención inmediata posterior al siniestro.
Asimismo, el director médico sostuvo un encuentro con Miriam Rosas, enfermera de vuelo que también resultó lesionada en el accidente. De acuerdo con el reporte, su evolución clínica es favorable, lo que representa un avance positivo dentro del panorama médico tras el incidente.
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Quién era Federico Ramírez
El menor fallecido fue identificado como Federico Ramírez, de dos años de edad y originario de Escárcega, Campeche. Al momento del accidente, el niño era trasladado desde Mérida hacia el Hospitals for Children de Galveston, donde recibiría atención médica especializada por quemaduras en el 40 por ciento de su cuerpo.
El traslado formaba parte de un esquema de atención internacional para menores con quemaduras graves, coordinado con instituciones médicas especializadas.
Saldo final del accidente aéreo
La Secretaría de Marina informó que el pasado martes fue localizado el cuerpo del octavo pasajero de la aeronave tipo King Air ANX-1209, con lo que se confirmó el saldo definitivo del accidente ocurrido en las inmediaciones de Galveston.
En su comunicado, la dependencia federal expresó su profundo pesar por el fallecimiento de seis personas y reiteró que las dos personas sobrevivientes se mantienen estables, bajo observación médica.
Las autoridades mexicanas y estadounidenses continúan con las investigaciones para esclarecer las causas del desplome, mientras las instituciones de apoyo mantienen acompañamiento médico y psicológico a las familias afectadas.
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