Por Luis Enrique Cauich
KANTUNILKIN, LAZARO CARDENAS, 27 de noviembre.- Seis meses, al frente de la CROC, bastaron para que el dirigente, sin toma de nota, Silvio Pech, sacara las garras, y para que sus seguidores se dieran cuenta de que las condiciones en el interior del sindicato no mejoraron luego de haber expulsado a la anterior líder, Juanita Sulub.
En mayo pasado, Silvio Pech encabezó una rebelión de tricicleros en contra de la dirigente Juanita Sulub, debido a que no rendía cuentas de las cuotas que pagaban y expulsaba a quienes se atrevían a cuestionarla, por lo que pidieron la intervención de los dirigentes estatales para calmar los ánimos.
Luego de que se tomaran las instalaciones de la CROC, en el centro de Kantunilkín, y se cambiaran las chapas, llegó un dirigente interino de la ciudad de Playa del Carmen, y a Silvio Pech se le nombró secretario general de los tricicleros, ya que no había dirigente y quien los representaba directamente era Juanita Sulub.
En su cargo sólo ha pasado 6 meses, y ya el dirigente de los trabajadores del pedal comienza a causar inconformidad entre sus agremiados, quienes lo acusan de caer en la prepotencia y querer solucionar los problemas internos con dinero.
José Enrique Cauich Graniel, quien lidera a un grupo de inconformes que buscan destituir a Pech Aban, por múltiples anomalías que existen en el interior de la CROC, señaló: “para eso pedimos la intervención de los líderes estatales de la central obrera, para terminar con las irregularidades”.
Para comenzar, dieron a conocer que Silvio Pech aparentemente otorgó dos mototaxis a René Alamilla, dirigente interino de la CROC, quien viene de Playa del Carmen y no tiene necesidad de ser beneficiado, y segundo no cuenta con el tiempo necesario, puesto que sólo lleva en Kantunilkín 6 meses y los socios que llevan años están siendo desplazados por su decisión.
Cauich Graniel y el grupo de inconformes, señalaron que otra de las inconformidades se debe a que como dirigente del gremio se tomó las atribuciones de adjudicarse 5 mototaxis, los cuales dio a rentar en 200 pesos por día, de modo que percibe diariamente la cantidad de mil pesos, mientras que a otros agremiados no les permite contar con su propia unidad.
Externaron que el hecho de tener dinero no le da el derecho de tratar al sindicato como una empresa donde busca su beneficio propio, ya que se deben tomar acuerdos de cuántas motos puede tener el agremiado, para evitar que luego se tengan monopolios en el interior.
“Existe mucha inconformidad porque hasta las tablas (letreros) están cobrando a 100 pesos, cuando no cuesta ni 50 pesos, y si no lo compras no te permiten trabajar, no rinden informe de dónde van a invertir ese dinero y cuando cuestionan a Silvio Pech, sólo responde que no le pueden hacer nada porque con su dinero lo solucionará todo”.
Externaron que apoyaron a Silvio Pech para expulsar a Juanita Sulub del sindicato por no rendir cuentas, pero en sólo 6 meses se dan cuenta que el actual dirigente es mucho peor; sin embargo, señalaron que aún están a tiempo de que las autoridades estatales de la CROC intervengan y nombren a un dirigente, es decir se cambie a René Alamilla como secretario general interino y se quite a Silvio Pech como dirigente de los tricicleros que no cuenta incluso con su toma de nota y ya ha causado serias inconformidades.