Por Olivia Vázquez
Cancún tocó el añorado 90 por ciento de ocupación en su hotelería al cierre del año 2018 y entrada del 2019, manteniendo una operación muy favorable en sus casi 36 mil habitaciones hoteleras que operan en el destino. Desarrollos que operan bajo el sistema “All inclusive” de cuatro estrellas, alcanzaron el 95 por ciento de ocupación, igualando el porcentaje de la hotelería del Centro de Cancún, que opera con plan europeo, lo que refleja la reactivación de estos sectores productivos. La presencia masiva de vacacionistas se ve en plazas, mercados y en playas públicas, pero también en los parques, en las casas y en los diferentes atractivos.
Parques temáticos de Cancún estiman que esta reactivación se mantendrá por lo menos hasta el próximo fin de semana con presencia sobre todo de turismo nacional, pero también se registra un importante flujo de turismo internacional que llega a los grandes desarrollos y que están activando los tours turísticos rumbo a Chichén Itzá, Tulum, y los parques más representativos del estado.
Este flujo mantiene a las arrendadoras de autos con operaciones arriba del 90 por ciento, mientras que para sectores como agencias de viajes, siguen dándose las reservaciones para lo que será el resto de la semana de parte del turismo nacional, con una inyección importante del mercado norteamericano que se prevé estará creciendo en estos días hasta llegar a una estabilización para lo que resta del verano.
En la hotelería, el reporte es positivo, con la apertura de cuartos de gran lujo que alcanzan tarifas que superan los 25 mil pesos la noche, hasta la pequeña habitación que se renta compartida por un módico precio de 200 pesos en alguna región de Cancún o una villa que puede alquilarse hasta en 5 mil pesos la noche para atender a 12 personas o un camarote de yate particular que podría alcanzar costos de hasta 30 mil pesos la noche.
En el gusto se rompen géneros y la oferta que sostiene Cancún le permite atraer a todo tipo de mercados y segmentos turísticos que buscan viajar con toda la comodidad y la más alta exigencia en el servicio, hasta el que llega con mochila al hombro y sólo busca una cama para pasar la noche y continuar su viaje.
Las operaciones hasta ahora son positivas y el Caribe mexicano se confirma como la región con la mayor reactivación de la temporada de invierno derivado de la fuerte conectividad que sostiene con todas las ciudades del país y del mercado norteamericano.
En esa conectividad, también se agregan vuelos procedentes de América Latina que siguen inyectándole al destino turismo de Argentina, Brasil, Colombia y de Chile que tienen a Cancún como el destino meta de América Latina.
En el caso de Cancún, donde se ha dado la mayor activación de los últimos cinco años, se sostiene una ocupación positiva, aunque se estima que el éxodo de visitantes iniciará a partir de este viernes, lo que llevará a un descenso importante en las operaciones.