De la Redacción
Han pasado nueve días del sangriento amanecer en Cancún, donde una fiesta al interior de un domicilio de la Región 219 culminó con la muerte de siete personas, en su mayoría jóvenes con todo un futuro por delante, y sus dolientes continúan a la espera de que se aclaren los hechos y se haga justicia; tras los lamentables hechos se desencadenaron cateos en tres domicilios ubicados como “casas de seguridad” donde fueron aseguradas armas de grueso calibre, vehículos y droga, y aunque autoridades señalaron a un hombre con el alias “El Gomitas”, como probable responsable del múltiple homicidio, éste continúa prófugo, a la fecha sólo una persona ha sido detenida e identificada por una de las víctimas.
Alrededor de siete minutos duró el ataque perpetrado, de acuerdo a los sobrevivientes y testigos, por dos hombres que llegaron a bordo de una camioneta tipo Ranger de color blanco, de la cual el conductor detuvo su marcha y junto con su acompañante descendieron de la misma portando armas de grueso calibre, al parecer tenían ya una orden, por lo cual comenzaron a disparar contra las personas que se encontraban al exterior del domicilio y a su paso hacia el interior continuaron realizando las detonaciones, algunos invitados lograron escapar brincando una de las bardas traseras de la casa, otros sólo fueron sorprendidos y no pudieron reaccionar a tiempo, por lo que fueron blanco fácil.
Aunque no queda claro el móvil del ataque y la saña con la cual fue perpetrado señala claramente al crimen organizado, y las declaraciones por parte del secretario de Seguridad Pública, Alberto Capella Ibarra, quien señaló como probable responsable a un hombre apodado con el alias “El Gomitas”, y también mencionó que el ataque fue derivado de una riña entre grupos antagónicos al servicio del narco, familiares de los seis jóvenes no mayores a los 25 años, que perdieron la vida, han desmentido el que sus hijos, hermanos, sobrinos, hayan estado involucrados con el crimen organizado, sólo les tocó estar en el lugar y hora equivocada, festejando el cumpleaños de uno de sus amigos, cuyo anfitrión mencionan salvó la vida al retirarse horas antes de que les arrebataran la vida.
Aun no habían pasado las 24 horas de haberse perpetrado el múltiple homicidio, cuando de manera simultánea fueron realizados operativos para el cateo de viviendas en distintos puntos de la ciudad, en dichos operativos participaron elementos del Ejército, la Marina, Policía Estatal Preventiva (PEP), Policía Ministerial y la Procuraduría General de la República (FGR).
El primer punto al que el convoy se dirigió fue en un domicilio de la Supermanzana 39 a espaldas de Plaza Outlet, ahí fueron decomisadas armas largas, un lanza granadas, cartuchos útiles y varias dosis de marihuana y crack, entre otros objetos, posteriormente, el operativo se trasladó hasta la Supermanzana 516, sobre la calle 39, entre la avenida 135 y 133, finalmente, se realizó un cateo en un domicilio de la Supermanzana 46, en la calle Real de Minas, a espaldas de Plaza Tucanes, entre la avenida Kohunlich y Tlaquepaque.
A la fecha autoridades no han dado a conocer si en los operativos realizados se logró la detención de alguna persona, así como el presunto líder de una célula criminal señalado como presunto responsable, de los lamentables hechos.