Por Lusio Kauil
JOSE MARIA MORELOS, 31 de octubre.- El panteón municipal se encuentra ya a su máxima capacidad, y por lo mismo, ahora, ya se empiezan a ocupar los pasillos, que son los espacios que tiene la gente para recorrer ese lugar, reconoció ayer un ciudadano de la cabecera municipal.
Esa situación, abundó, está provocando que los accesos hacia las tumbas más alejadas del panteón se estén cerrando y se dificulte el paso.
El ciudadano, que se identificó como Roberto Hernández Tun, consideró necesario que el ayuntamiento agilice el trámite para la ubicación de un predio para un nuevo cementerio municipal.
Comentó en entrevista, que algunas personas han optado por poner las tumbas de sus familiares (bóvedas) una sobre otra, cosa que no se ve muy correcta, expresó.
Manifestó que aquí no existe la costumbre de exhumar los restos de los muertos para colocarlos después en un nicho dentro del mismo cementerio, como es costumbre en Yucatán y Campeche.
Y, agregó, la tumba que se desocupara quedaría ya disponible para que se entierren otras personas que posteriormente fallezcan en la cabecera municipal.
Sobre este tema, también dio su opinión el exdiputado Pedro Mahay Caamal. Dijo que se enteró que ayer una persona no encontraba espacio en el cementerio para enterrar a su hijo, que falleció en la ciudad de Chetumal.
Por ello, expresó que es de suma importancia que el municipio trabaje para ubicar un nuevo espacio en donde se pueda habilitar un nuevo camposanto.
Recordó que el panteón municipal fue habilitado cuando don José Flota Valdez fue primer presidente municipal, en 1975. Al crecer la ciudad con el paso de los años, el cementerio se fue llenando, hizo ver.
Manifestó que ahora se tiene que buscar un predio para habilitar uno nuevo. Y no se debe esperar mucho tiempo, pidió el también exlíder municipal de la CNC en el municipio.
Desde hace unos cinco años, la gente viene demandando que se habilite otro cementerio, de hecho, el Cabildo aprobó recientemente que se busque otro predio en el ejido de La Presumida para habilitar un nuevo cementerio.