Por María Luisa Vázquez
Mientras no se hagan reformas a la Ley sobre Venta y Consumo de Bebidas Alcohólicas en el Estado de Quintana Roo, todos los criterios en relación a las “horas extras” están bajo la tutela del gobierno del estado, mientras que el gobierno de Cancún estima que en unos tres meses tendría resultados sobre la Controversia Constitucional que presentó contra el gobierno estatal.
Desde el pasado 10 de febrero entraron en vigor las reformas hechas por el Congreso del Estado a la Ley de Alcoholes de Quintana Roo, en la que se establecen nuevos criterios para ampliar el horario a establecimientos con venta de alcohol.
De hecho a partir de esta ley, la venta de alcohol en envase cerrado está limitada exclusivamente hasta las 11 de la noche, sin opción a “horas extras”.
En el caso de negocios con venta de alcohol al copeo podrán pedir ampliación de horario, de 11 de la noche a las tres de la mañana, aunque el gobierno del estado es el responsable de aplicar diversos criterios, como que el lugar cuente con cámaras de videovigilancia.
Aunque la Secretaría Estatal de Hacienda ofreció a los municipios revisar el asunto, y promover nuevas reformas, mientras eso no ocurra la Ley sigue vigente, y por esa razón el Ayuntamiento de Benito Juárez ingresó una Controversia Constitucional en contra de la Ley sobre Venta y Consumo de Bebidas Alcohólicas en el Estado de Quintana Roo, ya que le quita la recaudación por el cobro de horas extras y el recurso se lo queda el gobierno del estado.
Según la Tesorería Municipal, unos 70 millones de pesos dejaría de recaudar en Benito Juárez este 2019, exclusivamente por el cobro de “horas extras”.
En días pasados, el secretario del ayuntamiento, Jorge Aguilar Osorio, dijo que en unos tres meses se podría tener una resolución sobre la Controversia Constitucional, ya que el gobierno del estado invade la autonomía municipal, porque Benito Juárez tiene su propia Ley de Hacienda Municipal, y establece lo que le está facultado cobrar.