De la Redacción
PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 5 de marzo.- A pesar de los empresarios que siguen denunciando la proliferación indiscriminada de vendedores ambulantes, módulos de tours y acoso de comisionistas en la Quinta Avenida, hasta el momento, el ayuntamiento a través de Fiscalización pone oídos sordos y no actúa para darle nuevo orden a la emblemática zona.
Incluso, el reclamo se extiende porque solo con un pago de 250 pesos mensuales pueden trabajar con un permiso municipal, cuando un comercio establecido paga impuestos a los tres órdenes de gobierno, así como servicios básicos y la nómina de los empleados.
Los empresarios que por razones obvias omiten sus nombres lamentaron que ninguna autoridad municipal, encabezados por la edil Laura Beristain, les haya tomado en cuenta los reclamos porque no solo se está afectando a los establecidos sino al mismo destino vacacional.
Indicaron que lo mismo puedes comprar un tour para diversas actividades en la Riviera Maya o Cozumel a bajos precios de los establecidos con comisionistas acosadores, que artesanías no propias de la región y hasta vendedores de tacos, cocos, limosneros, vendedores de frutas, panes, churros, puros y hasta masajes de pies con peces.
Precisaron que la actual administración municipal no puede culpar al anterior gobierno del desorden en la Quinta Avenida porque de entrada se ha disparado el número de informales y en segunda, los permisos son municipales a través de la Tesorería que se expiden mes con mes por la cantidad irrisoria de 250 pesos, sin importar el giro.
Asimismo, los empresarios apuntaron que muchos de esos comercios ambulantes carecen de permisos e incluso, los beneficiados lo rentan a otra persona, con lo cual si existiera voluntad política se aplica la ley y de inmediato los retira, dado a que las condicionantes debe trabajarlo el titular, generalmente personas de la tercera edad, madres solteras o con alguna discapacidad, basados en un estudio socioeconómico.
Reclamaron también, que a casi cinco meses de la nueva administración municipal no haya sesionado el Comité Dictaminador del Comercio en la Vía Pública, cuyos miembros son además de los funcionarios del ayuntamiento está integrado por representante de las cámaras empresariales y sindicatos, donde se analizan las solicitudes de permisos a ambulantes por su condición económica, necesidad y las ubicaciones en la que definitivamente el primer cuadro no está permitido, aunque no se respete.