La actual contingencia por el COVID-19 no merma la fe de los carmelitas que avocan a la oración desde sus hogares o bien asistiendo a las iglesias con sana distancia.
Este domingo dieron inicio los festejos religiosos de la Semana Santa con el tradicional Domingo de Ramos, actividad que se realizó en solitario por los sacerdotes de diversas parroquias ante la contingencia por la pandemia de Coronavirus, dando la pauta a lo que será una Semana Santa diferente, pero sólo en circunstancias puesto que la fe y amor en cada día santo es el mismo por parte de los feligreses.
Plataformas digitales
Las diferentes parroquias de la Isla han hecho recurso de las plataformas digitales para llegar a sus creyentes en este período de contingencia, donde una considerable parte de la comunidad se mantiene en casa.
En la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción se mantiene la fe con sana distancia, pues aún con las transmisiones en redes sociales, algunos creyentes asisten al atrio de la iglesia para poner sus plegarias en silencio y después retirarse; además de aprovechar para confesar sus pecados con el sacerdote de la parroquia.
(Texto y fotos: Emmanuel Sansores)