
Una mujer, líder de un grupo criminal dedicado a la venta de estupefacientes en bares y discotecas, además de extorsiones por “derecho de piso”, fue detenida, al igual que dos de sus colaboradores.
La captura se dividió en dos operativos, dieron a conocer las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE), durante la conferencia del Gabinete de Seguridad.
En una primera acción en la Supermanzana 105, fraccionamiento Tierra Maya, fueron detenidos Zaida Rocío “N”, alias “La Rapunzel”, lideresa de esta estructura criminal.
Se dio a conocer que la mujer iba en compañía de Fernando “N”, de 37 años, originario de Tabasco, él conducía el automóvil en el que se trasladaban. Tras una revisión se les aseguró diversas dosis de hierba seca con las características de la mariguana, así como envoltorios de presunto crack y cocaína.
Con la información obtenida se logró la ubicación de un tercer involucrado, mismo que fue identificado como Ángel de Jesús “N”, de 33 años, quien se encontraba en la Supermanzana 31, en el centro de la ciudad. Desde ese punto se encargada de distribuir estupefacientes a diversos bares y discotecas de la avenida Tulum.
Durante esta diligencia se aseguraron dosis de mariguana, crack, metanfetaminas y cocaína, además de una báscula gramera y pequeñas bolsas de plástico donde se empaquetaban las drogas para su posterior distribución.
La información revelada por la Fiscalía señaló que Zaida es un objetivo prioritario de la delincuencia en Quintana Roo, además de ser operadora de un grupo criminal con alcance nacional; asimismo, se precisó que también se encargaba de cobrar extorsiones a empresarios conocidas como “derecho de piso”.
Fuentes allegadas a la investigación afirmaron que “La Rapunzel” inició su carrera delictiva como jefa de una célula, pero escaló hasta llegar a líder de la organización que tenía su centro de operaciones en Cancún.
Las autoridades señalaron que, con la evidencia reunida, los fiscales del Ministerio Público llevaron ante un Juez de Control a los tres detenidos, mismo que confirmó la vinculación a proceso, dando como medida cautelar la prisión justificada y un plazo de dos años para el cierre de la carpeta de investigación.
Los detenidos ahora se encuentran internados en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de esta ciudad, en tanto las autoridades continúan en busca de más evidencias en su contra.