Yucatán

El periodismo, desde que se fundó la noticia es como una industria

PROGRESO, Yucatán, 9 de noviembre.- En un ambiente de tristeza y un gran sentimiento por el adiós de reconocida dama, doña Raquel Romero Bentata, abordamos un tema que interesa al sector periodístico que en esta ciudad y puerto desde su fundación en 1871, también nació otra industria en este lugar además del servicio en los muelles el periodismo que se iniciaba con el suceso de un puerto en Yucatán, para cubrir las necesidades de importación y exportación en conexión con otros países que, desde ese momento, empezarían a fabricar su nueva prosperidad exportando su henequén y las nacientes producciones de las nuevas industrias.

Era de todos sabido en nuestro Estado que en Yucatán ya teníamos varios periódicos y el periodismo cada día se extendía más.

Sin embargo, cuando se abrió el nuevo puerto esta fue la primera noticia con que se fundó el periodismo en Progreso, y desde entonces todo lo que ocurría en el nuevo puerto por sus conexiones internacionales era un suceso importante no sólo en México, sino en todos los países del planeta pues se esperaba hacerle una gran propaganda al henequén y a la fila internacional al tener contacto Progreso por la vía marítima con sus relaciones en todo el mundo, si es que podía impulsarlas en beneficio de Yucatán.

Todo lo que sucedía minuto a minuto en el nuevo puerto era noticia importante por ser en su mayor parte novedades para los lectores de todas partes del periodismo, en el renglón de la noticia fue creciendo rápidamente, en Progreso primero con corresponsales que servían enviándoles noticias a los periódicos del Estado, primero por los coches que servían a Mérida y Progreso desde que tuvimos el primer camino luego por el hilo telefónico, y cuando se inauguró el servicio de telégrafos por medio de la clave.

Como ya se dijo, la noticia se convirtió como una industria pues salían las noticias como las erupciones de un volcán y hasta llegó a tener Progreso su propia revista denominada El Horizonte, que competía fuertemente con la revista de Mérida y la competencia fue tan reñida que en una ocasión se entabló una lucha entre ambos, arrebatándose la noticia una a otra.

A partir del siglo pasado, en este puerto se publicaron varias revistas pues Progreso ya había alcanzado gran importancia en el mundo de los lectores y, además, había mucho material relacionado con la cultura y no podían dejar de tener este lugar sus revistas propias, hasta la maquinaria propia para imprimirlas sin necesidad de acudir a Mérida.

En la actualidad el periodismo ha alcanzado una posición tan relevante y necesaria que la prensa se ha convertido en una parte de las necesidades del puerto y se puede asegurar que Progreso en Yucatán, después de Mérida, es el sitio donde se mueve más el papel periódico y además es el punto en Yucatán donde todo es noticia, y es la razón de que tenga más lectores.

El puerto pretendió tener su propio periódico

La industria editorial del puerto avanzaba con su periódico El Horizonte primero y luego con otras revistas que salían cada semana, quincena y mes.

La imprenta estaba donde funciona el taller único en las calles 27 x 34, imprenta que al fin quedó en manos de la Federación Obrera y la idea de un diario no se pudo llevar al cabo por muchas razones; no obstante que en Progreso habían desde impresores hasta intelectuales y promotores de arte para poder publicar un buen diario, pero el puerto se quedó al final con solamente impulsar el periodismo y mantener la industria de las letras apoyando la circulación de los diarios de Mérida, debido a que tenía muchos lectores y era un centro de noticias diarias, como lo sigue siendo ahora, con gran importancia en el puerto y en todas partes porque todo es noticia, sobre todo ahora que se incrementa el turismo y continúan registrándose sucesos a cada instante en las diversas actividades que se realizan y se puede asegurar que el periodismo es ya una industria por los servicios que presta.

Pena y tristeza por el fallecimiento de doña Raquel

El jueves falleció después de larga dolencia la señora Raquel Romero Bentata, dama muy conocida y estimada por haber sido una mujer muy trabajadora y con un corazón, como se dice, que no le cabía; el jueves mismo se llevó al cabo la ceremonia religiosa por el suceso y además para despedirla por los distintos sectores de la localidad.

Doña Raquel contaba con 92 años de edad y la mayor parte de su vida se dedicó al trabajo apoyando a su difunto esposo don Manuel Alonzo Benítez, quien fue un personaje en la pesca como armador pues con sus numerosas embarcaciones apoyó el desarrollo pesquero de la localidad juntamente con su hermano José, y además doña Raquel con sus delicados sentimientos siempre apoyó las obras piadosas del puerto y por su triste despedida para el descanso eterno están recibiendo condolencias sus deudos, entre ellos sus hijos muy estimado también Manuel, José Luis, Blanca Isabel, Eduardo y demás deudos.

Porfirio Díaz en Yucatán

Primer Presidente de México que llega por la vía marítima desembarcando en Progreso

Hace un siglo, el dictador, que fue recibido por la crema y nata de la oligarquía henequenera, presidida por el Gobernador Olegario Molina Solís, inauguró varias obras como la pavimentación de la capital, el Hospital O’Horán, el Asilo Ayala y la ex Penitenciaría Juárez.

Hace 112 años, el 5 de febrero de 1906, arribó por primera vez a Yucatán un Presidente de la República, el general Porfirio Díaz Mori, quien pasó a la historia como un dictador en cuyo mandato se ahondaron las diferencias sociales que ocasionaron la Revolución Social de 1910.

Vino a la Entidad acompañado de su esposa Carmen Romero Rubio, así como sus ministros, entre ellos el de Educación y Bellas Artes, Justo Sierra Méndez.

Díaz Mori, llamado “El ilustre caudillo” por los periódicos de la época, estuvo cinco días en tierras yucatecas donde inauguró obras promovidas por el gobernador Olegario Molina Solís, entre ellas la primera pavimentación de la capital, el Hospital O’Horán, el Asilo Ayala y la ex Penitenciaría Juárez.

Fue tan grata la impresión que el Presidente de la República tuvo del Gobernador de Yucatán que al poco tiempo, en 1908, se lo llevó a la capital del país para ubicarlo en el Ministerio de Fomento.

La visita del general Díaz a Yucatán ocasionó tal euforia que incluso el gobernador Molina Solís declaró “inhábiles los días en los que se verifiquen fiestas para el Presidente”, según la publicación en el Diario Oficial del Gobierno del Estado Libre y Soberano de Yucatán, consultado en la Biblioteca del Congreso del Estado.

En ese mismo medio oficial se publicó un Editorial el sábado 10 de febrero de 1910, día en que el Presidente de la República partió de nuevo para la capital del país, que se refirió a la visita como “un suceso extraordinario”, con una “entrada triunfal, sin precedente en los fastos yucatecos el esplendor y la magnificencia que han revestido” y “el acto de recepción solemnísimo del glorioso caudillo”.

De hecho, poetas de la talla de José Peón Contreras y Luis Rosado Vega, así como José I. Novelo, recitaron odas en honor del general Díaz llenas de grandilocuentes elogios que hacen palidecer los que William Blake escribió en “El Tigre”, en honor a la belleza de dicha bestia.

Los periódicos de la época “El Eco del Comercio”, “El Peninsular”, “La Revista de Mérida” y “El Español” vertieron numerosos elogios a la visita del Presidente de la República e incluso el Gobernador Molina Solís mandó imprimir y distribuir tres álbumes para conmemorar aquellos eventos.

Esos figurines aún pueden ser consultados, bajo ciertas normas, en el Centro de Apoyo a la Investigación Histórica de Yucatán.

La visita del general Díaz fue precedida de un importante evento en la política yucateca, pues el 1º de febrero de 1906, cinco días antes, Molina Solís asumió por segunda ocasión consecutiva el Poder Ejecutivo de Yucatán.

El general Díaz partió de la capital del país en ferrocarril rumbo al puerto de Veracruz, donde se embarcó en el vapor de guerra “Furst Bismarwck”, propiedad de la Hamburg.- Amerika Linie, el cual lo trajo hasta el puerto de Progreso, donde desembarcó el lunes 5 de febrero a las 8:30 horas.

El cuento de Goliat y David

Está tan difundido el cuento bíblico de Goliat y David que incluso el nombre de Goliat se escucha mucho hasta con apodos a los hombres fornidos porque, según dicen, Goliat fue un gigante.

El otro día necesitábamos cerciorarnos de cómo era de verdad Goliat para una alusión en nuestras crónicas y consultamos las enciclopedias que aportaron más o menos los siguientes datos sobre Goliat y David.

Goliat, gigante filisteo de la ciudad de Gat, de 2 m de alto, según los setenta, que fue vencido y muerto en duelo por David.

Existe otra tradición puesto que el segundo libro de Samuel afirma que Goliat murió en manos de Eijanan. Pero el libro de los paralipómenos intenta unificar las dos tradiciones divergentes al decir que Eljanan, hijo de Yair, mató a Lahmi, hermano de Goliat.

Curiosos apodos que le ponían a la empresa Aeromaya

En los aeropuertos lo que no tiene nombre, se improvisa; ya que el ingenio está siempre a la expectativa para las referencias cuando lo reclaman las necesidades, o cuando es conveniente una mención satírica o humorística.

La empresa yucateca Aeromaya cuando inició sus actividades hace muchos años no se escapó de los chistes, unos le llamaban “Aerofalla”, otros “Aerochaya” y no faltó quien le pusiera “Rompope”. En los casos en que se pedía una explicación por esto último, la respuesta era: “pues porque hay que tener muchos huevos para subir y mucha leche para bajar…”.

Sin embargo, fueron cuentos de los chistosos que nunca faltan, pues Aeromaya dio siempre un buen servicio y es en la historia una de las mejores empresas aéreas yucatecas que hemos tenido, y cuyo fin se debió netamente a intereses políticos de empresas que deseaban acabarla debido a que cada día se extendían más sus servicios.

Podían ser cagadas de mosca en el mapa

Uno de los empleados del Aeropuerto llama un mediodía a varios compañeros para hacerles el siguiente cuento que le habían soplado la noche anterior:

“El comandante de una aeronave que vuela sobre el Pacífico solicita a su navegante la posición del momento debido a que por efectos de una tormenta que habían atravesado sólo contaban con gasolina para escasas horas”.

El oficial revisa las cartas e informa al capitán: “no se preocupe, en caso apurado el mapa señala unos puntitos como islas cerca de la zona donde volamos”.

“Bien -observa el capitán-, si son islas, no me preocupa en caso de una emergencia… pero ¿qué tal si esos puntitos son cagadas de moscas en el papel?”.

La bella gatita se quedó con las ganas

En los tiempos que este reportero alternaba su trabajo aeronáutico en Mérida con el periodístico ocurrían tantas cosas que llevaban un sello especial como para recordarlas, que las íbamos archivando en la memoria para escribirlas o soltarlas en cualquier momento en grupo de amigos.

Y, claro, se aprovechaban hasta los cuentos, porque los compañeros pilotos o despachadores, como el viejo don Carlos Sobrino, siempre andaban de cuentos.

Una mañana de poco movimiento, escuchamos uno de los chismes propios de don Carlos. Contaba que una noche se reunieron en el tejado de una casa unas diez gatas de las más chismosas, que comentaban el caso de un “angora” de otro vecindario, que pasaba a cada rato, presumiéndoles, sin que se detuviese a platicar con ellas.

“tiene de qué presumir el chavo ese, decían algunas de las gatas, porque está precioso y yo de buena gana me dejaría llevar por él”.

“Así es, respondió otra de ellas, pero no le hace caso a nadie y ni el saludo nos contesta”.

Una gata muy llamativa, de color blanco y ojos azules como gringuita, alzó la voz: “A ustedes no les hace caso porque no tienen con que darse a querer. Esta noche, ya verán cómo me voy con él, pues conquistarlo va ser cosa fácil para mí”.

Dicho esto último, el elegante “angora”, con un paso y un movimiento que hacía suspirar a todas las gatitas, pasó frente a ellas, casi haciendo circo en el caballete del tejado.

Ahora verán, -exclamó la gatita blanca-, ahora verán. De un salto ya estaba junto al codiciado ejemplar, y pegándose a él y casi rozándolo, lo acompañó hasta desaparecer de la vista de las compañeras.

“Ahora falta que nuestra amiga conquiste a ese petulante”, expresaron al unísono las felinas. “Vamos a esperarla a que retorne”.

Casi amaneciendo, vieron retornar a la gatita blanca, pero en su semblante se notaba que estaba enojada. “Dinos cómo te fue”, le preguntaron.

“Se ha pasado toda la noche el bendito vecino contándome su vida desde que lo castraron”.

La importancia de Progreso en el teléfono

La importancia del puerto de Progreso queda demostrada, una vez más, en el directorio telefónico 2003-2004, que se está distribuyendo en esta localidad.

Se reafirma la posición de este lugar como la antesala del Estado y el primer puerto de la Península con cerca de 4,000 aparatos instalados en Progreso, entre los que figuran en el directorio y los privados.

El puerto de Progreso aventaja así a Tizimín y Valladolid, que son los puntos que tienen más aparatos telefónicos después de Progreso.

El directorio de este año, peca como el anterior de una letra muy pequeña que a veces hay que ver con microscopio, debido a que cada año trae más publicidad en su Sección Amarilla.

También peca en que en cada ocasión, en su sección turística no le dedica ni una sola letra al puerto de Progreso, que en estos momentos recibe a los cruceros más grandes del mundo, no obstante que en el aspecto económico este lugar le aporta más a la empresa telefónica por el número de aparatos que tiene instalados.

En su portada, el directorio, en vez de una página atractiva de nuestros valores eternos (de Yucatán), se la dedica a la propaganda de los productos telefónicos, provecho que pagan los usuarios con el pago de las elevadas tarifas y de los renglones que le cobran al abonado cada día más altos.

Pero para los observadores queda ahí, en las páginas, la importancia actual de Progreso como el puerto de mayor movimiento comercial en el Sureste, como abastecedor de cereales a las industrias y lugar de embarque de productos de las maquiladoras, base de combustibles y puerto de escala de los cruceros turísticos más grandes del mundo.

El puerto de Progreso cuenta con 3 mil 672 aparatos telefónicos; le siguen Tizimín con 2 mil 676 y Valladolid con 2 mil 592.

Cantidad que habla elocuentemente de la relevancia de Progreso en la península, ya que en este año aumentaron las instalaciones debido a la necesidad de sus servicios.

En el directorio se observa un nuevo sistema para localizar a la persona y su teléfono por medio de los apellidos que se clasifican, como es natural, por orden alfabético.

Se nota ahí mismo cuáles son las familias más numerosas del puerto, siendo éstas la Pech, con 72 teléfonos; Martínez, 63; Pérez, 61; González, 59; Rodríguez, 54; García, 48; López, 46; Gómez, 44, y Díaz, 43.

Las familias con pocos miembros son Llanes y Cetz, con uno, y Gurubel, Jatar, Mata, Manzanilla, Ontiveros, Ramayo, Sansores, Rosales, Romo, Gamiño, DeGzray, Cobá y Cárdenas, con dos.

Revelación, el regreso

Como la novela televisada “Mirada de mujer, el regreso”, así hizo su aparición nuevamente en el panorama porteño, la revista social Revelación, bajo la dirección de la comunicadora Leticia González Ramírez.

Después de seis años de ausencia, por estar realizando su directora otras actividades, Revelación salió ayer a la luz con mejor material y más información sobre el quehacer social de esta localidad. Su portada es a colores con la figura de la Srita. María Esther Magadán Alonzo.

Además, Revelación trae, en esta continuación de su circulación, artículos muy interesantes como Yucatán, la misteriosa y legendaria rivera del Mayab; la dieta de la Luna, Fragata portuguesa, Carta a Santa Claus, Quinceañeras 2003, Reinas del Colegio Guadalupe Victoria, Desfile Deportivo, Ayer y hoy en la diversión, Adolescencia y sexualidad y otros de interés general.

Deseamos éxito y larga vida a Revelación en este su retorno.

(R.F.B.)