ESCARCEGA, Campeche.- La oportuna actuación de un perro entrenado para detectar drogas coadyuvó a que elementos de la 25 Compañía de Infantería No Encuadrada (25 CINE) y policías de la Gendarmería Nacional descubrieran que el pasajero de un autobús que se dirigía a Quintana Roo llevaba consigo varias bolsas con pastillas psicotrópicas y marihuana, razón por la que se le puso a disposición de las autoridades ministeriales federales.
Se trataba de Ramsés Morales Morales, originario de Veracruz, quien viajaba en un autobús de pasajeros marca Volvo, color beige y placas de turismo, el cual fue sometido a una revisión de rutina en el kilómetro 162 de la carretera federal Escárcega-Chetumal, en el entronque que conduce al ejido 20 de Noviembre, municipio de Calakmul, a las 18:12 horas del sábado.
Los elementos del Ejército Mexicano de la 25 CINE y los oficiales de la división de Gendarmería de la Policía Federal, utilizaban un perro entrenado para detectar drogas y éste les llamó poderosamente la atención cuando olfateó una mochila que contenía la leyenda Billabong, de color gris con azul y amarillo, propiedad del veracruzano Ramsés Morales Morales, tal como él mismo lo confirmó.
El joven pasajero, quien vestía playera tipo polo de color azul, un pantalón blanco y tenis color negro, ataviado con una gorra blanca con azul, autorizó que los militares y los gendarmes revisaran su mochila, e incluso él mismo la abrió.
En su interior llevaba tres bolsas de plástico transparente que contenían unas pastillas de color amarillo, una bolsa de plástico transparente en la que se observó una sustancia sólida de color café, una bolsa de plástico también transparente pero con estampillas y una bolsa de plástico transparente con orilla verde, la cual contenía hierba verde y seca.
También llevaba dos bolsas forradas con cinta canela, las cuales al igual que la anterior, contenían hierba seca con las características propias de la marihuana. Y en una almohada de viaje, color café con beige, notaron que había una abertura, misma que permitió a uno de los militares meter la mano y encontrar dentro otras tres bolsas de plástico transparente que contenían una sustancia sólida de color café.
El propietario de la misma aseguró que se trata de drogas que él mismo consume, pero confirmó que no contaba con permiso de la autoridad sanitaria para disponer de ellas, así que tras leerle sus derechos fue trasladado hasta el Hospital General “Dr. Janell Romero Aguilar” para que lo certificara un médico, arribando a esta ciudad a eso de las 20:25 horas.
Dos horas después, se le puso a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación de la subsede de la Procuraduría General de la República de esta ciudad para los trámites legales.
(Texto: Martín Contreras
/ Fotos: Especial)