Yucatán / Sucesos

Imparable la ola de robos

HOPELCHEN, Cam., 27 de agosto.- Como todos los domingos acudió a un predio que tiene en renta para alimentar a sus cerdos, criadero asentado en las afueras de esta ciudad en un terreno ejidal.

Tremenda sorpresa se llevó al notar que siete cerditos de poco más de tres semanas habían desaparecido y tras caminar por el área, no observó huellas de algún animal que haya dado cuenta de los animalitos que son crías de raza y que vendiéndolos en el mercado local pueden obtener al menos cinco mil pesos.

Esta situación desalienta a quienes se dedican a la actividad porcícola, ya que cualquiera puede llegar y afectar tu patrimonio con toda impunidad y descaro. Los cerditos pudieron haber sido colocados en un costal y fue lo único que se llevaron al aprovechar la ausencia del velador del predio.

Y es que en los últimos días se ha incrementado la presencia de fuereños, algunos de ellos llegan del Sur del Estado y se ocupan temporalmente por la región, para luego continuar su paso hacia otras ciudades del país.

No hay hasta el momento algún operativo que permita conocer quién o quiénes ingresan al municipio y aunque en México la libertad de tránsito está garantizada, lo cierto es que el municipio es tranquilo y son contados los momentos en que la paz es rota, salvo en las zonas limítrofes y de las cuales es parte fundamental, porque en el municipio se encuentra el Punto de Unión Territorial (PUT) donde confluyen los estados de Yucatán, Quintana Roo y Campeche.

Derivado de ello en esta ciudad los robos se han incrementado y es por ello que se hace necesario la colaboración ciudadana con la denuncia y los rondines de vigilancia más frecuentes de la Policía Municipal.

La instalación de cámaras de seguridad es un hecho y por el momento ya hay dos bases listas para que ahí sean colocadas las cámaras, por lo que la ciudad se integrará a las modernas tecnologías de video vigilancia.

Víctor Pérez es una persona que llegó a la ciudad hace poco más de un año y desde ese tiempo se ha dedicado al trabajo y por ello lamenta que las personas que no son del área se les vea con recelo, aunque reconoce que así como hay gente buena, honesta y trabajadora, hay gente que llega con el afán de dañar al prójimo en su persona o en su patrimonio.

(Jorge Alberto Uc Moreno)