El que Oscar Rosas Gonzáles haya prohibido a la población consumir alcohol en el Malecón Costero y en la playa en un horario hasta las 19:00 horas, ha provocado que policías estatales hagan su agosto y acosen a la población, así lo denunciaron algunos carmelitas quienes aseguran que sin estar tomando, y sólo por el hecho de estar en la playa, los policías llegan y los amenazan con llevarlos a los separos y que les harán alcoholímetro sin la presencia de un médico legista, así lo denunció la ciudadana Altair López Sánchez.
El municipio de Carmen es donde mayor inseguridad hay en todo el Estado, y es que ni la Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Tránsito Municipal (DSPVTM), ni la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP) han podido combatir dicho factor de inseguridad y garantizar la seguridad de todos los carmelitas.
Pero para el Alcalde Oscar Rosas fue más fácil la prohibición total del consumo de alcohol que garantizar los operativos y vigilancia en toda la zona de Playa Norte, esto sólo generó que los policías estén cazando a los ciudadanos en la orilla de la playa y sin estar consumiendo bebidas embriagantes sean amenazados de ser detenidos por el hecho de ser de noche y estar en aquella zona.
“El problema no es que hayan prohibido que las personas tomen cervezas en el Malecón Costero y aquí en la playa hasta cierto horario, que incluso no es el que marca la ley de venta de alcoholes, que es hasta las 10:00 de la noche, el detalle que los policías con tal de sacar su mordida o cumplir las órdenes de sus jefes, que es recaudar fondos para el pago de aguinaldos, estén buscando cualquier excusa para detener a las personas”, expresó.
Asimismo mencionó que en su caso ella se encontraba platicando con su esposo y viendo la luna llena, cuando llegó una patrulla y les pidió que descendieran del vehículo, a lo que le dijeron que estaba bien y que no hacían nada malo ni estaban consumiendo cervezas, pero a los elementos de seguridad no les importó dichas palabras y los amenazaron con llevárselos detenidos.
“Cuando me bajo del vehículo nos dijeron que nos iban a realizar un alcoholímetro, le respondí que estaba bien pero que dónde estaban el médico legista para que en presencia de él se me aplicará, pues utilizan las máquinas donde uno sopla y no te dejan ver el resultado y hacen su voluntad, por decir eso el policía me amenazó con llevarme detenida por falta de respeto a la autoridad, creo que el Presidente Municipal debe de poner orden a los policías, no podemos seguir en ese papel de extorsiones por parte de estos servidores públicos”, concluyó.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)