Sin mediación de ninguna autoridad, efectivos de las Policías Municipal y Estatal, varios de ellos vestidos de civiles, encabezados por el director operativo Andoreni Rivera Casanova, arremetieron violentamente contra alrededor de 50 ex trabajadores del Gobierno Municipal, quienes bloquearon la entrada a la ciudad, ambos carriles, a manera de protesta contra la Alcaldesa Maritza Díaz Domínguez -acusada de nepotismo, colocando a su familia en la nómina del Ayuntamiento-, debido al incumplimiento del pago de liquidación, desde el mes de octubre, y de la promesa del Gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, quien aseguró que sí les pagarían.
Con lujo de violencia fueron detenidos los ex empleados inconformes Jorge Richard Arcos y Miguel Ramos Arias, quienes fueron subidos a las patrullas y trasladados a la Ciudad de San Francisco de Campeche.
En el zafarrancho, varias mujeres que protestaban por el pago justo de su liquidación fueron golpeadas por los “ejemplares” guardianes del orden.
El bloqueo ocurrió alrededor de las 12:30 horas de ayer, cuando los ex trabajadores llegaron hasta la avenida de entrada al Pueblo Mágico y a la altura del Cecytec colocaron una cadena en ambos carriles y se apostaron al frente de la misma, portando cartulinas con leyendas en contra de los Gobiernos Estatal y Municipal emanados del PRI, lo que originó un caos vehicular por más de una hora.
NO hubo diálogo
Los manifestantes señalaron que se encontraban en una protesta pacífica y que esperaban que alguna autoridad municipal o la propia Alcaldesa Díaz Domínguez llegaran hasta el lugar para entablar diálogo, pero se les olvido que el Gobierno opresor de Alejandro Moreno Cárdenas siempre ha privilegiado la “Ley del Garrote” antes que el diálogo.
Los ex empleados sólo pedían que les pagaran lo justo, tras ser despedidos injustificadamente por la actual administración municipal priísta; durante el tiempo que estuvieron ahí dejaron pasar una ambulancia y el tránsito de motocicletas, bicicletas y personas no se interrumpió, únicamente el de automóviles.
A unos metros de donde se encontraban los manifestantes se aparcaron tres patrullas y uniformados y en ningún momento hubo acercamiento con quienes pedían el pago de su liquidación. Alrededor de 13:40 horas arribaron más efectivos policiacos, varios de ellos vestidos de civil; minutos después, el director operativo Rivera Casanova se aproximó con sus hombres hasta el carril de salida de la ciudad y sin mediar palabra alguna, dio la orden de quitar la cadena que bloqueaba el paso, lo que provocó que iniciaran forcejos, empujones, gritos e insultos. A las mujeres les tocó la peor parte.
Otro grupo de policías aprovechó para detener a Richard Arcos, a quien jalonearon y sometieron para subirlo a una patrulla, a pesar de los intentos de algunas mujeres de evitar que los policías lograran su objetivo; lo mismo sucedió con Ramos Arias, quien fue subido de forma violenta a otra patrulla.
Luego del violento desalojo, los manifestantes se apostaron en una de las banquetas, pero ya no volvieron a cerrar el paso vehicular.
(Texto y fotos: Redacción / POR ESTO!)