Síguenos

Última hora

Automovilistas de Chetumal no respetan reglamento vial; ¿cuáles son las consecuencias?

Campeche

Tradicional festejo a los Fieles Difuntos

CANDELARIA, Campeche.- Con una misa oficiada en las instalaciones del cementerio municipal cientos de candelarenses recordaron ayer a los fieles difuntos, a sus seres amados que se han adelantado en el camino a la eternidad, en donde el presbítero de la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, Javier Eloín Can Trejo pidió a los fieles a orar por el descanso de sus seres queridos a fin de que logren la vida eterna.

“Estamos aquí no para celebrar la muerte sino para celebrar la vida, la resurrección que ha vencido toda muerte porque en Cristo todos hemos sido salvados para alcanzar la vida eterna”.

Pidió a vivir con fe la Santa Misa implorando a Dios el perdón de nuestros pecados.

“Cuando una persona amada muere, parece el fin de aquel que ha muerto, cuando el corazón de la persona amada deja de latir parece que está condenada a la destrucción total, pero nuestra fe en Jesucristo nos dice que la vida de la persona no acaba con la muerte, sino que está destinada a vivir eternamente en la presencia del Señor”, señaló ayer el presbítero.

Ante cientos de personas integrantes de familias se congregaron al inmueble para recordar a sus seres amados que se han adelantado en el camino a la eternidad dijo que es inevitable pensar en la muerte, pues es uno de los misterios de la vida que no se comprende y que es inesperado porque no sabemos ni el día, ni la hora en que va a acabar nuestra vida, pero la palabra de Dios nos ilumina para comprender antes que la muerte, la vida.

La vida es un regalo porque nadie puede darse a sí mismo la vida, eso significa que nadie puede venir al mundo por causalidad o por accidente, porque todos estamos en la memoria de Dios, que ninguna persona es huérfana de origen porque Dios es la fuente de la vida, por eso nosotros como creyentes vivimos agradecidos porque es un don, un regalo.

Es preciso señalar que lejos de ser algo de tristeza la celebración de los Fieles Difuntos en esta ciudad se ha tornado como toda una tradición en la que cientos de familias se reúnen para convivir y recordar a aquellos que se han adelantado en el camino a la eternidad.

En tanto para que para algunas familias se les ha hecho tradición acudir a las tumbas y comer sobre ellas lo que más les gustaba a sus difuntos en donde tienen oportunidad de tener una convivencia plena y a la vez enseñar a las nuevas generaciones cómo se debe recordar a sus amados fallecidos.

Venta de flores

Buena demanda registraron los establecimientos dedicados a la venta de flores en esta ciudad, pues desde días antes de la celebración las familias adquirieron arreglos y flores para llevar al camposanto para recordar a sus seres queridos que se adelantaron el camino al más allá.

Edelmira Herrera Rojas, propietaria de la florería Kairos que se ubica en la colonia Centro y Rafael Leonardo García, expendedor de flores de muertos coincidieron en que las ventas mejoraron desde hace unos días.

Dijeron que sus actividades en esta ocasión tuvieron un mejor repunte que en años anteriores, ya que la tradición de sigue vigente entre la sociedad candelarense, es algo que no se ha perdido y creemos que va cobrando fuerza.

Altar tradicional

La familia Lizcano Gómez preserva la tradición de los altares de muerto, lo cual se ha trasmitido de generación en generación en su familia, pues elaboran uno de los más elegantes altares donde colocan diversas ofrendas que eran preferidas de sus seres queridos.

Cada año confeccionan su altar para horrar a sus seres amados que se han adelantado en el camino, donde realizan rezos y les depositan ofrendas.

Esta familia de la colonia Independencia encabezada por la señora María Lourdes Gómez Sánchez, ha sido una de las que ha mantenido muy arraigada esta milenaria tradición, en su altar su puede observar fotografías de sus seres amados.

Así como diversos dulces de la región como son de calabaza, papaya, cocoyol, de camote, ciruela, coco, ciricote, nance curtido y manjar de arroz con leche.

Es uno de los altares con mayor variedad de ofrendas y veladoras que luce esplendoroso, ante el cual la familia cada año se reúne para recodar a sus seres amados y convivir con sus invitados.

(Texto y fotos: Corresponsalías / POR ESTO!)

Siguiente noticia

Tradicional Paseo de los Muertos