CHAMPOTON, Campeche.- Unas 50 máquinas expendedoras de agua operan en esta ciudad sin que hasta el momento la Copriscam haya constatado que el vital líquido que comercializan es apto para consumo humano.
Aunque el Ayuntamiento es quien otorga permisos de salud con el cual los propietarios de las máquinas tramitan ante la tesorería su licencia de funcionamiento, la verificación de la calidad del líquido no es su competencia.
En tanto, las lagunas legales existentes limitan al Sistema Municipal de Agua Potable para cobrar un impuesto por el consumo de agua en las expendedoras.
-Es un negocio redondo, el agua no les cuesta y sí por el contrario la cobran luego del proceso de purificación, dijo una fuente del SMAPACH.
La misma fuente afirmó que la Comisión Nacional del Agua es la instancia responsable de otorgar los permisos para la explotación del vital líquido.
Por otra parte, trascendió que el elevado consumo de agua que tienen diariamente las máquinas ya está influyendo para que el vital líquido pierda presión en estos días de escasez.
(Texto: Alejandro Landeros)