Campeche

'Ser humildes de corazón y amar al prójimo”

DZITBALCHE, Cam., 20 de febrero.– Con enfático llamado a ser humildes de corazón y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos, el presbítero José Luis Yeh Ehuán ofició la celebración eucarística y una hora santa por la celebración de su 60 aniversario de vida, ante decenas de feligreses en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de María.

Yeh Ehuan destacó que “ustedes tienen fe en nuestro señor Jesucristo glorificado, no tengan favoritismos, está todos los días aquí, sólo tenemos que venir a visitarlo y ofrecerle oraciones y agradecerle la vida que nos ha dado.

“Supongamos que entran al mismo tiempo en su reunión un hombre con un anillo de oro, lujosamente vestido y un pobre andrajoso, que fijan ustedes la mirada en el que lleva el traje elegante y le dicen: ‘Tú, siéntate aquí, cómodamente’, en cambio le dicen al pobre: ‘Tú párate allá o siéntate aquí en el suelo, a mis pies’, ¿no es esto tener favoritismo y juzgar con criterios torcidos?”, cuestionó el sacerdote.

Y continuó en su homilía: “Entonces nosotros debemos de ser humildes, no dejarse llevar por el dinero y los bienes, todo eso son vanidades, cuando se acaba las cosas cambian y se te acaba tus amigos de lujo, adinerados.

“¿Acaso no ha elegido Dios a los pobres de este mundo para hacerlos ricos en la fe y herederos del reino que prometió a los que aman? Ustedes, en cambio han enfrentado al pobre, ¿acaso no son los ricos los que oprimen a ustedes, los que los arrastran a los tribunales?, ¿no son ellos los que denigran el nombre ilustre que les impusieron a ustedes?

“Si cumplen la ley suprema de la Sagrada Escritura: ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo’, obren bien; pero si tienen favoritismos están cometiendo pecado y esa ley los acusa como transgresores.

“En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se dirigieron a los poblados que dice la gente, ‘soy yo Elías’ y otros que ‘soy Juan el Bautista’ y ustedes quién dice que soy yo, Pedro le contestó: ‘Tú eres el Mesías’ y él les ordenó que no se le dijera a nadie.

Llamó a hacernos humildes de corazón, a compartir lo poco que tenemos y amar al prójimo como lo dice Nuestro Señor Dios, “sólo así vamos a lograr la vida eterna y hay que prepararnos para los tiempos difíciles que se acercan”.

Al término de la celebración, Yeh Ehuán recibió muestras de afecto, regalos y el mariachi “San Diego” le entonó “Las Mañanitas” y más tarde compartió el pan y la sal en ameno convivo con los creyentes.

(Néstor Cuevas)