Como “un insulto a las y los campechanos” calificaron amas de casa, madres solteras, profesionistas y estudiantes el oneroso salario que perciben los 35 diputados del Congreso del Estado, al considerar que su labor legislativa y de gestión social ha sido deficiente, y que no se justifican los más de 40 millones de pesos que se embolsan anualmente.
Ciudadanos entrevistados, como Beatriz Cabrera y Esther Balan, comentaron que resulta un insulto el salario que perciben los diputados por, según dijeron, “calentar la curul”, “pelearse por temas políticos” y “levantar la mano”.
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El desempeño de los 35 diputados del Congreso local fue calificado como poco eficiente por habitantes del Estado, quienes consideran que las iniciativas y reformas aprobadas poco benefician a la población.
De acuerdo con la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) y la página oficial del Poder Legislativo, cada diputado de Morena, PRI, MC, PAN, PT y PVEM le cuesta al pueblo campechano 1 millón 175 mil 394.5 pesos al año. Esta cifra incluye 60 mil 441 pesos de dieta, 20 mil pesos de Fondo de Gestión, 90 mil 661.5 pesos de aguinaldo, 2 mil pesos en vales de gasolina y 6 mil 500 pesos de Fondo de Ahorro.
Durante el año únicamente presentaron 205 iniciativas, lo que representa un costo de 200 mil 677.10 pesos por iniciativa. Además, algunos legisladores, como los del PAN y el PVEM, fueron señalados por su baja productividad.
Habitantes como Moisés Nah, Martín Hernández y Manuel Vázquez coincidieron en que el Congreso campechano atiende más bien su agenda personal y partidista, dejando de lado las demandas ciudadanas y reforzando la percepción de un Congreso alejado y personalista.
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JY
