
Un fuerte accidente vehicular ocurrió la noche del viernes sobre la avenida Isla de Tris, a las afueras del fraccionamiento San Miguel y frente a la tienda de autoservicio Bodega Aurrerá, cuando el conductor de un automóvil Volkswagen Jetta color café, con placas de circulación M62-BAS de la Ciudad de México, presuntamente bajo los efectos del alcohol, invadió el carril contrario y colisionó con un tractocamión Kenworth.
De acuerdo con testigos y peritos en el lugar, el Jetta, cuyo conductor se presume es de origen ruso, se desvió de su trayectoria y cortó circulación a un tractocamión Kenworth, color naranja con blanco, número económico 12-AL-1V, que se dirigía hacia Mérida. El choque provocó que el vehículo compacto saliera proyectado hacia un tercer automóvil, una camioneta Nissan blanca con placas DKY-594-A del estado de Campeche, en la que viajaba una familia.
Milagrosamente, no se reportaron personas lesionadas en el percance, aunque los daños materiales fueron considerables y el tránsito en la zona se vio severamente afectado por más de una hora. Los tres vehículos quedaron inmovilizados en el lugar, bloqueando parcialmente la circulación.

Tras el accidente, el conductor del Jetta descendió de su vehículo y argumentó que regresaría en unos minutos, supuestamente para buscar su teléfono celular. Sin embargo, huyó del lugar y dejó abandonado el automóvil. En el interior del vehículo se encontraron varias cajetillas de cigarrillos y envases de cerveza tipo caguama, llenos y fríos, lo que refuerza la versión de que el conductor estaba bajo los efectos del alcohol al momento del incidente.
Elementos de Tránsito Municipal y representantes de las aseguradoras llegaron minutos después para realizar el peritaje correspondiente y deslindar responsabilidades. Hasta el momento, el presunto responsable no ha sido localizado.
Las autoridades exhortaron a la ciudadanía a conducir con responsabilidad, especialmente en zonas urbanas donde el tránsito vehicular y peatonal es constante, y recordaron que conducir en estado de ebriedad no solo es un delito, sino una amenaza para todos.
JGH