Roger Aguilar Cachón
El pasado sábado 15 del presente, en el marco del VII Congreso de Numismática y Filatelia de Yucatán, el C.P. don Pedro Góngora Paz recibió un reconocimiento de manos del presidente de la Sociedad Numismática y Filatélica Peninsular, A. C., Sr. Fernando González Ortega, por su amplia trayectoria en el coleccionismo y difusión de la numismática en nuestro Estado.
Para conocer un poco más acerca de la numismática y de la trayectoria del recipiendario, a manera de entrevista, platicamos con el Sr. Góngora Paz.
Don Pedro, ¿qué es la numismática?
Mira Roger, la numismática es una ciencia por medio de la cual nosotros conocemos nuestra historia, así como su desarrollo. Desde siempre, el hombre ha visto la necesidad de encontrar maneras de intercambiar cosas y dar un valor a las mismas; en este caso y de manera específica, en la antigua Roma, se pagaba a los funcionarios públicos con sal, y por medio de ésta se podían realizar transacciones de compra y venta. A este tipo de paga con sal se le denominó salario. Posteriormente, en cada sociedad del mundo se recurrieron a otros elementos para usarlos como moneda, recordemos que en el caso mesoamericano, el cacao fue una pieza importante en este aspecto.
Con el paso de los años, la Numismática ha sido el medio por el cual, los países resguardan o dan a conocer su pasado. Eventos de carácter social, cultural, humanístico, hazañas de nuestros héroes que nos dieron Patria, y acontecimientos históricos se han plasmado en las monedas que en un momento determinado han servido no sólo como mecanismo de pago e intercambio, sino también para preservar nuestro legado histórico.
México ha sido uno de los países que ha contado y aún hoy, pero en menor escala, con minas de oro, plata, cobre y demás materiales que han servido para la elaboración de monedas que han sido reconocidas en el mundo entero. En caso específico, en el Oriente nuestras monedas fueron pirateadas y usadas como monedas locales, dando a cada país una determinada marca para hacerlas suyas, ésas son conocidas como chops. En Filipinas, China y Japón fueron las monedas de 8 reales que utilizaron como propias.
En México nació la primera Casa de Moneda de Latinoamérica, la moneda ha sido siempre muy bella y se comienza con la elaboración de troqueles y fabricación de monedas. Cada evento se registra en diferentes materiales y ahora se está usando el valor de acero, eso no vale nada, pero los numismáticos estamos obligados a tenerlas todas.
¿Desde cuándo es numismático?
Desde que estaba en la escuela secundaria, aproximadamente en 1958, llamó la atención en mí, se despertó una inquietud hacia las monedas. Comencé a coleccionar pequeñas monedas de no mucho valor y me fui interesando cada vez más, y cuando ya tuve ingresos profesionales comencé a alimentar mi acervo numismático, y creo ser uno de los dos o tres numismáticos en nuestro medio que tiene la colección completa de monedas hasta nuestros días. Más que una afición, es una pasión que te hace investigar los datos de cada época. La numismática es una ciencia porque nos acerca a la historia y a la geografía. Ya en la edad madura, mi colección comienza a crecer, al grado de tener ya todas las que se han troquelado y circulado hasta la fecha actual. Es una pasión que ha movido mi vida y día a día trato de estar pendiente de cuáles son las nuevas que están saliendo en circulación para tenerlas y aumentar mi colección.
¿En qué se basan los precios que se da a las monedas?
A través de los años, las monedas han adquirido valor y hay algunas piezas que se venden en miles de pesos, como son de manera específica los pesos del Caballito de 1914 o bien el Morelos (conocido como Cachetón) de 1949. Estas son piezas que se troquelaron en cantidades pequeñas, lo que hace que su valor sea un poco elevado. En esta exposición la traje para que la gente la conozca, no para vender. Ayer me ofrecieron cantidades elevadas por esas dos monedas pero no las vendí, ya que forman parte de mi colección particular.
Don Pedro, ¿ha pensado a dónde irá a parar su colección en el futuro?
Esa es una buena pregunta Roger. Mira, yo tengo tres hijos, pero a ninguno de ellos le atrae la numismática y no se puede obligarlos a que les guste. No podemos decir a nuestros hijos que estudien, por ejemplo Medicina, cuando su vocación es el Derecho. Mira, hace unos cuatro años puse en venta mis colecciones en 100 mil dólares, y el Dr. Eduardo Tello Solís me comentó que le interesaba a la Universidad de Alabama. Me puse en contacto con ellos y llegaron a la casa el Rector de la Universidad y otras personas para valuar mis colecciones. Ellos se interesaron, pero me dijeron que en casos como éste había un recurso que se llamaba donación para la adquisición de piezas para la mencionada universidad. Estuvimos de 2 de la tarde a 8 de la noche tratando de encontrar una buena solución, pero ellos solamente me ofrecían 80 mil dólares y restaban 20 mil, y ellos, creo, que querían que esa cantidad se les diera como donación, pero a fin de cuentas no llegamos a ningún acuerdo. Lo que gané de esa larga reunión fue que el Rector de la Universidad de Alabama me diera una carta, donde hacía de su conocimiento el valor de las colecciones. Y la catalogó entre 3 o 4, la máxima es 5 Uncirculate.
¿Qué representa para don Pedro Góngora Paz el reconocimiento que le hace la Sociedad Numismática y Filatélica Peninsular, A. C.?
La verdad, Roger, yo lo acepto y agradezco en todo lo que vale, para mí es una alimentación espiritual, no soy afecto a este tipo de cosas. Por otra parte, yo tengo una preparación, no podemos rechazar lo que nos ofrecen y me comentaron que fue una decisión de carácter unánime. Y la acepto de manera humilde y con mucho agradecimiento.
Y aprovecho este momento para invitar a las nuevas generaciones a conocer un poco de la numismática y despertar en ellos el interés por la historia, ya que en cada moneda que circula o ha dejado de circular lleva en sí una parte de nuestra historia, y es bueno que la gente joven se acerque a esta ciencia. La numismática tiene la cualidad que te impulsa a la investigación; yo encargaría a nuestra niñez y juventud acercarse a ella y tratar de entender nuestra historia por medio de las monedas, nuestra historia es dinámica y lleva implícita mucha parte de nuestro desarrollo social, cultural e histórico.