Del panorama decimístico cubano del siglo XX (17)
1348La yagua en el agua flota
La yagua en el agua flota
y el río se hace en el puente
un músico transparente
con una guitarra rota.
La conclusión más remota
viene a su murmullo frío,
hay como un escalofrío
mirando para un desvelo
y tal parece que el cielo
se va corriendo en el río.
Gerardo Inda Castillo
1349Viene el sol amarilloso
Viene el sol amarilloso
en su recorrido diario,
del sistema planetario
igual que un padre celoso.
Se ve pasar tembloroso
en su tránsito viajero
y se esconde en el alero
rojo de la tarde bella:
a ver si coge una estrella
hablando con un lucero.
Gerardo Inda Castillo
1350Estampida bajo la lluvia
Tus ojos negros, pequeños,
me embridaron una vez
cuando con sed a tus pies
bebí una lluvia de sueños.
Por mis labios caribeños
entró a mi pecho la vida
con la tibieza encendida
del amor que vuela y danza.
Vino tu noche a mi lanza
cabalgando en estampida.
Víctor Hugo Parés Lores
1351Con voz, machete y espuela
A los cucalambeanos fundadores
y a sus seguidores.
Gracias, Nápoles Fajardo,
por sembrarnos tantos sueños:
ver nuestras cosas sin dueños
en tus versos, primer bardo.
La España Imperial fue un fardo,
pero al llegar la espinela,
quiso ser machete, espuela,
voz de nuestro patriotismo;
firme paso en el abismo
de esta gigantesca estela.
Víctor Hugo Parés Lores
1352De mariposa y de flor*
Si el tocororo quisiera
sobre una palma posar,
si el perfume de azahar
impregnara la bandera;
si en julio la primavera
perpetuara su esplendor,
y una llovizna de amor
hace que el aroma suba
para mostrarnos a Cuba
de mariposa y de flor…
Si en arte se atesorara
sencillez de caracol,
y si los rayos del sol
anidaran en la clara
superficie donde ampara
la hondura su voz de aurora,
si el reloj fuera la hora
donde el amor se revela…
diríamos: Rafaela,
de Cuba; de Cuba, Dora.
José Miguel Ramos Puerto
*Decimas leídas en la actividad donde se otorgó la condición de Miembros de Honor de la Asociación Nacional del Ciego a Dora Alonso y Rafaela Chacón Nardi.
1353Emigrante
(fragmento)
Cuando salí de mi tierra
volví la cara llorando.
Mi niñez fue un caracol
de nácar sobre la playa,
un ensueño de atarraya
abriéndose con el sol.
Fue una huella de arrebol
sobre la arena inviolada,
y fue una lágrima anclada
en el paisaje marino
cuando un bufón peregrino
le penetró la mirada.
Costa del Sol malagueña,
cortijo de la añoranza,
tengo una quilla que avanza
por la pupila pequeña.
Allí hay una cruz que sueña
con el sueño de mi beso,
y dice la voz de un rezo
que se oye en el olivar
que hay un mástil en el mar
anunciando mi regreso.
Carmen Donaire
1354Lamentos del caminante
(fragmento)
¿Quién desgrana la semilla
en noches de luna llena
sin importarle esta pena
que nace en mi pesadilla?
¿Quién no ha rezado a la orilla
del infierno sin quemarse,
y a quién no importa quedarse
sin el pan de cada día
sin un grano de alegría
y todo sin inmutarse?
¿A quién le debo, Señor,
la causa de este abandono,
tal sirviéndole de abono
a una tumba sin amor?
¿A quién le debo el dolor
de no cruzar la frontera,
de estancarme en la barrera
que represa mi albedrío,
dime, Señor: ¿en cuál río
de llanto ahogo mi espera?
Irma Rosa Covín Fernández
1355Como una llama de amor
Apareciste en mi puerta
con la luna en cada mano,
transparente amor temprano
y la desnudez despierta,
con el alma descubierta
y durmiéndose otra vez;
despertándome después
los orgasmos nos volvieron,
y en mis yaguas se encendieron
mil candiles de una vez.
Martha Pérez Leyva
1356En la otra mitad
Caminar camino yerto
que nos ha tocado en suerte,
con la vida y en la muerte
a donde duermo y despierto.
En la mitad del desierto
yo seguiré siendo dama;
está el hombre cuando me ama
en esa mitad herida,
se está muriendo la vida
en la mitad de mi cama.
Martha Pérez Leyva