Marco Antonio
Sánchez Solís
El binomio atleta-guía es una de las características del atletismo para Ciegos y Débiles Visuales, donde ambos trabajan como uno mismo para lograr los mejores resultados para los deportistas.
El guía es una parte fundamental para el desarrollo y los resultados de los atletas con esta discapacidad, ya que es una extensión de los deportistas, aportando los ojos para poder llegar a la meta.
Ellos prestan el sentido de la vista durante las competencias, además son parte importante de la preparación del atleta, pues son una extensión para el deportista para así poder competir y correr, proporcionándole información al atleta durante la carrera.
El guía debe suplir la visión del atleta, y para lograrlo deberá informar de lo que pudiera acontecer en la carrera a su compañero, se debe buscar que el atleta y el guía se adapten perfectamente para así lograr un mejor rendimiento deportivo.
En los últimos años, Yucatán a destacado a nivel nacional en eventos para personas con discapacidad visual y todo esto gracias a la preparación de los atletas, pero sin duda alguna también de los guías, quienes igual son atletas de alto rendimiento, por el mismo esfuerzo, preparación y entrenamiento que realizan de forma conjunta con el deportista.
Desgraciadamente en Yucatán existen pocos guías, pero están muy bien preparados, la labor que realizan es digna de reconocerse ya que implica una gran preparación, no sólo física, sino también psicológica.
Entre los mejores guías locales están Jesús Manzanilla Peniche, Rosa Nava y Javier Carrillo López, quienes han apoyado a los atletas de esta especialidad a conseguir grandes resultados.
Para Jesús Manzanilla Peniche, el ser guía significa entregarlo todo, no sólo como complemento de la vista del atleta, sino trabajando por los mismo objetivos y metas.
“Formar parte de sus logros me causa mucha felicidad por que cada medalla o cada marca superada habla bien del trabajo que hacemos en cada entrenamiento”.
Manzanilla Peniche inició su carrera deportiva como atleta convencional y vio en el atletismo para disminuidos visuales la falta de guías, situación que lo motivo para ser uno de ellos y ayudarlos para cumplir sus objetivos.
“Quiero demostrar lo que se puede lograr ayudando a los demás, quiero motivar a cada deportista a no tener miedo, esto es lo que me motiva ser el ejemplo para otros guías que puedan haber en un futuro que aprenda de mi e incluso que sean mejores que yo”.
Jesús, quien es guía del atleta Rodrigo Águila Lara, desatacó que la relación con el atleta debe ser muy importante pues tiene que saber qué es lo que le gusta, así como sus inquietudes y sus debilidades.
“Hay que formar una hermandad, en la pista y fuera de ella, tengo que formar parte de él, así, al momento de competir, tendrá toda la confianza hacia mí, por eso dicen que nos volvemos uno mismo al correr”.
Mencionó que la preparación que tienen los guías es igual de demandante que la del atleta, ya que se trabaja en 2 sesiones; una como corredor individual enfocándose en la intensidad para mejorar los tiempos del atleta y la segunda parte conjunta con su atleta donde se enfocan en los aspectos técnicos de la carrera, mismos que servirán al momento de guiar al atleta y de esta manera facilitarles la carrera al momento de la competencia.
Por su parte, Carrillo López, guía del atleta Manuel Durán, califica los logros obtenidos junto con su atleta como “logros mutuos”, destacando la responsabilidad de guiar a personas carentes de vista.
“Fui atleta convencional desde muy chico y tuve la pasión por el atletismo, descubriendo el deporte para ciegos y débiles visuales por medio de mi entrenador, el me invito a correr con los chicos carentes de vista y decidí apoyarlos en un entrenamiento y eso bastó para seguir con el proceso que hasta la fecha sigo realizando”.
“Como guía y atleta convencional me preparo entrenando de lunes a sábado durante 4 horas aproximadamente, ya que llevo entrenamiento como atleta individual y como guía, también la comunicación con el atleta es muy importante ya que se debe tener una sincronización con el deportista entre otros aspectos que incluyen el trabajo técnico y físico”.
Por su parte, Rosa Nava mencionó que decidió ser guía pues de esta manera cumple con sus objetivos deportivos, destaca que ser los “ojos” de otra persona le ha traído muchas satisfacciones al ver coronado su esfuerzo con alguna presea y de esta manera saber que cada sacrificio valió la pena.
La guía de Karla Esquivel dice que el atleta debe tenerle mucha confianza a su pareja de competencia.
“Hay que conocer al atleta para tener una buena relación, desde que es lo que le gusta hasta lo que les molesta no simplemente conocerla en la pista si no en si vida cotidiana, que sientan que una llamada de atención no es un regaño si no para el mejoramiento de ella misma por que al momento de competir tendrá toda la con fianza hacia mí persona”.
Y con respecto a su preparación, comentó que para estar al nivel del atleta tiene que entrenar el doble, tanto individual y como en el binomio, tener mejores tiempos que el atleta ya que si no es así no habrá mejoramiento en el deportista.
[gallery jnewsslider="true" ids="142457,142455,142453,142451,142450"]