HOUSTON, EE.UU., 17 de febrero (MLB).- El intento de control de daños que los Astros de Houston tienen en éstos momentos tras dar la cara públicamente por su trampa seguramente no ha salido cómo la organización esperaba, luego de que ahora toda la liga, incluyendo peloteros, directivos y fans, están en contra de ellos y se enfrentan a una temporada muy, muy difícil, en la que no serán bienvenidos en ningún lugar.
Sin embargo, el comisionado Rob Manfred tampoco ha salido muy bien librado de todo éste embrollo, ya que muchos jugadores consideran que su castigo a los Astros fue muy benevolente y prácticamente, no sentar un precedente mucho mayor para impedir el robo de señales. Y el mismo comisionado sabe que pudo haberse librado de toda ésta mala publicidad de no ser por unas personas: Los periodistas.
En específico los reporteros Ken Rosenthal y Evan Drellich de The Athletic, quiénes fueron los primeros en publicar toda la trama y la historia del robo de señales. Manfred de manera sarcástica “felicitó” a los reporteros por su “buen trabajo” al obtener documentos privados y así exponer todo el esquema del robo de señales, según mencionó a su compañera Linsdey Adler, también de The Athletic:
“Saben que, muchas felicidades. Obtuvieron un mensaje privado que cómo ustedes saben, la envié a un oficial de un equipo de Grandes Ligas. Buen trabajo al reportear”.
Todo esto de no ser por los reporteros, no habría sido público, y de no hacerse público, el comisionado Manfred no se habría ensuciado las manos y poner en tela de juicio su reputación y quizá su trabajo, ya que su contrato actual expira en 2024 y podría no verlo renovado más allá de ese punto.