
En una noche épica en Los Ángeles, el Toluca demostró carácter y temple para coronarse campeón de la Campeones Cup 2025 tras vencer 3-2 al LA Galaxy en un partido que tuvo de todo: polémica arbitral, expulsiones, remontadas y un final de infarto que quedará grabado en la memoria de los aficionados mexicanos.
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El encuentro disputado en territorio estadounidense comenzó con ambos equipos mostrándose cautelosos, apostando por el equilibrio táctico antes que por la espectacularidad ofensiva. El 0-0 inicial parecía extenderse hasta que el árbitro Iván Bartón cambió el rumbo del partido.
Al minuto 25, el silbante marcó penal a favor del Galaxy tras considerar que hubo falta de Gallardo sobre Gabriel Fortes dentro del área. Diego Fagúndez no falló desde los once pasos y estableció el 1-0 que complicaba el panorama para los Diablos Rojos.
El desempeño del juez Iván Bartón fue duramente cuestionado a lo largo de los 90 minutos. El árbitro mostró un total de diez tarjetas amarillas y dos expulsiones, generando un ambiente tenso y fragmentado que afectó el desarrollo del juego.
La más polémica de las expulsiones ocurrió justo al finalizar el primer tiempo, cuando el técnico del Toluca, Antonio Mohamed, conocido como "El Turco", se lanzó hacia la media cancha para reclamarle decisiones al árbitro. Bartón no dudó en mostrarle la tarjeta roja, lo que derivó en que también expulsara al hijo del entrenador en medio del caos.
Según reportes, el árbitro "regaló penaltis y se tragó tarjetas rojas" en diversas acciones, generando un ambiente de confusión y descontento entre ambos equipos.
Con su técnico expulsado y un marcador adverso, el Toluca salió al segundo tiempo con una actitud completamente diferente. Los dirigidos por Mohamed se tomaron "con seriedad el asunto de ganar todo lo que disputaran" y tomaron el control del partido.
Tras tres tiros de esquina consecutivos, al minuto 53 llegó el empate gracias a un zapatazo desde 30 metros de Nicolás Castro que se incrustó pegado al poste derecho del portero Mivovic, estableciendo el 1-1 que replanteaba completamente el encuentro.
El empate solo alentó momentos del Toluca, que debió mantener cautela debido a la velocidad de Paintsil, el atacante ghanés del Galaxy que había marcado triplete el fin de semana anterior ante Kansas City y que representaba un peligro constante en los contragolpes.
Al minuto 83, cuando parecía que el empate llevaría el partido a una definición por penales, Pec aprovechó un descuido de la defensa mexicana para establecer el 2-1 a favor del Galaxy, dejando al Toluca contra las cuerdas.
Los cinco minutos del infierno al paraíso
Lo que vino después será recordado como uno de los finales más dramáticos en la historia de competencias entre equipos de Liga MX y MLS.
Al minuto 88, un rechace al centro del área fue aprovechado por Franco Romero, quien con un remate despiadado estableció el 2-2 que devolvía la esperanza a los seguidores del Toluca.
Pero la historia no terminaría en empate. Al minuto 93, en el décimo primer tiro de esquina para los Diablos Rojos, apareció Andrés Pereira para conectar el balón y establecer el definitivo 3-2 que desató la euforia mexicana en suelo californiano.
El triunfo del Toluca confirmó una vez más la efectividad de las jugadas a balón parado, consideradas el "trademark" del técnico Antonio Mohamed. Los tiros de esquina y cobros de falta se convirtieron en el arma letal que permitió a los Diablos Rojos revertir un marcador que lucía adverso.
Esta especialidad táctica ha caracterizado los equipos dirigidos por "El Turco" a lo largo de su carrera, y nuevamente resultó determinante en un partido de tal magnitud.
Para el LA Galaxy, la derrota representa un nuevo golpe en lo que ha sido una temporada complicada. El equipo angelino ha sido descrito como uno de los más "desahuciados en la MLS", a pesar de contar con figuras de calidad en su plantilla.
La actuación de Paintsil, quien venía de marcar triplete ante Kansas City, no fue suficiente para que el Galaxy pudiera sostener ventajas en el marcador, evidenciando problemas defensivos que fueron determinantes en el desenlace.
El legado de la remontada
Este triunfo del Toluca se suma a la lista de remontadas épicas del fútbol mexicano en suelo estadounidense, demostrando la mentalidad ganadora y el carácter que caracteriza a los equipos de la Liga MX cuando todo parece perdido.
La capacidad de los Diablos Rojos para levantarse del marcador adverso en múltiples ocasiones durante el partido evidenció la fortaleza mental del plantel y la efectividad del trabajo técnico, incluso con Mohamed expulsado y dirigiendo desde la distancia.
El título representa un logro mayúsculo para la institución toluqueña, que sigue sumando trofeos a sus vitrinas y consolidándose como uno de los equipos más importantes del fútbol mexicano contemporáneo.
Los aficionados que viajaron a Los Ángeles pudieron celebrar un triunfo que parecía imposible minutos antes del final, mientras que el resto de la afición mexicana celebró la victoria como un triunfo del fútbol azteca sobre su contraparte estadounidense.