BASE AÉREA AL-ASAD, Irak/WASHINGTON, EE.UU., 26 de diciembre (EFE/AFP).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió hoy en que el cierre parcial de la Administración gubernamental continuará “lo que sea necesario”, en declaraciones a los periodistas durante una visita sorpresa a Irak.
El mandatario efectuó estas declaraciones en la base aérea Al Asad, al Oeste de Bagdad y gestionada por tropas estadounidenses e iraquíes.
Hoy se cumple el quinto día de clausura parcial de la Administración gubernamental, que ha ocasionado fuertes caídas en los mercados y sin un acuerdo a la vista sobre los fondos que pide Trump para construir un muro con México.
Trump quiere que el Congreso destine 5,000 millones de dólares para la construcción del muro, pero los demócratas se niegan a ceder y, por el momento, solo están dispuestos a destinar 1.300 millones a seguridad fronteriza, aunque con restricciones que impiden la construcción de la barrera.
El congresista republicano Mark Meadows, presidente del Freedom Caucus, un grupo de legisladores ultraconservadores en la Cámara de Representantes, afirmó hoy que la decisión de Trump de lograr 5,000 millones de dólares para la construcción del muro en la frontera es “muy firme”.
No cobrarán
La clausura es parcial porque tres cuartas partes de la Administración -incluido el Pentágono- tienen fondos hasta septiembre de 2019. El cierre afecta a 800,000 de los 2,1 millones de trabajadores federales de EE.UU., que no cobrarán mientras permanezca cerrado el gobierno y están a expensas de la aprobación de un presupuesto.
Mientras el mandatario visitaba Irak, en EE.UU. no hubo hoy indicios de que los republicanos y los demócratas estén cerca de un acuerdo que ponga fin a la clausura, que afecta al 25% de la Administración.
Un ayudante de la líder de la minoría demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, indicó hoy que no hay “novedades” en las negociaciones con los republicanos para acabar con la clausura del Gobierno, según el diario The Washington Post.
Aun así, el Senado, que en este caso lleva el liderazgo para el presupuesto, tiene previsto reunirse este jueves a las 16:00 hora local (21:00 GMT) para tratar de reabrir la Administración.
Hace tres días, el director de Presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, consideró “muy posible” que el cierre se prolongue hasta enero de 2019 cuando la oposición demócrata retome el control de la Cámara de Representantes tras haber ganado las elecciones legislativas de noviembre.
Hasta enero
De no alcanzarse un arreglo en el Senado, el cierre de la Administración podría prolongarse hasta enero, cuando los demócratas asumirán el control de la Cámara Baja y podrían aprobar financiación para la Administración sin destinar fondos para el muro de Trump.
Sin embargo, de acuerdo con The Washington Post, no está claro si esa legislación lograría después el visto bueno del Senado, donde los republicanos tienen la mayoría.
Además, el líder de los conservadores en la Cámara Alta, Mitch McConnell, ha advertido que cualquier acuerdo tendría que ser firmado por el presidente.
Entretanto, Wall Street lanzó hoy un mensaje de optimismo al cerrar con fuertes ganancias tras la peor Nochebuena de su historia desde la Gran Depresión, en medio de la inquietud suscitada por el cierre de la Administración gubernamental.
Pese a que los interrogantes de inestabilidad económica y política permanecen en el horizonte, el Dow Jones de Industriales ascendió un 4,98% y avanzó 1.086,25 puntos, hasta 22.878,45 enteros, mientras que el selectivo S&P 500 subió un 4,96% o 116,60 puntos, hasta los 2.467,70.
Visita sorpresiva
Trump dijo que Estados Unidos no puede ser el “policía” del mundo tras llegar a Irak este miércoles en una visita sorpresa a las tropas estadounidenses.
El mandatario, cuya visita estuvo rodeada de un gran secretismo, habló con los uniformados así como con líderes militares, y defendió su decisión de retirar las tropas estadounidenses de Siria y reducir su número en Afganistán.
Las fuerzas estadounidenses “no pueden estar más tiempo. Ya han estado suficiente”, indicó a sus generales.
“Estados Unidos no puede seguir siendo el policía del mundo”, dijo. “Es injusto cuando solo nosotros asumimos la carga” y “no queremos que otros países se aprovechen de nosotros, de nuestros increíbles militares, para protegerlos. No pagan por ello y tendrán que hacerlo”, aseveró en la primera visita que realiza a tropas desplegadas en una zona de guerra desde que llegó al gobierno hace dos años.
Los viajes presidenciales para aumentar la moral de las tropas son una tradición en Estados Unidos desde los años posteriores a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, y Trump recibió críticas considerables por su negativa hasta ahora a visitar una zona de guerra.
¿Tiempo de irse?
Las reducciones de tropas estadounidenses en zonas de conflicto, y la abrupta forma en que fueron anunciadas, provocaron alarma entre los aliados de
Washington y estuvieron entre las causas de la renuncia del secretario de Defensa Jim Mattis, quien fue uno de los pesos pesados de la administración de Trump.
En su carta de dimisión, inusualmente enérgica, Mattis reprendió al presidente destacando la “firmeza” de sus propias posiciones respecto a la necesidad de “tratar a los aliados con respeto y de ser sincero respecto de los actores con malas intenciones y los competidores estratégicos”.
Trump también recibió críticas de Francia y de otros aliados, así como de figuras importantes de su propio partido Republicano.
Sin embargo, el presidente hizo de la salida de Estados Unidos de escenarios de guerra aparentemente interminables una prioridad desde su elección, en 2016, y considera que llegó el momento adecuado para concretarlo.
Salida de Siria
Trump, ratificó y defendió su decisión de retirar las tropas de la vecina Siria, donde hay desplegados 2,000 soldados como parte de una coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), y relató cómo fue dando plazos a los generales estadounidenses para salir de ese país.
“Ellos dijeron recientemente que si podían tener más tiempo. Yo dije no. No pueden tener más tiempo. Han tenido suficiente tiempo. Los hemos noqueado”, aseguró Trump, en alusión a la que ha proclamado como “derrota” del EI en Siria. Resaltó que ha sostenido “muy buenas conversaciones” con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de quien dijo que también quiere “noquear” al EI y anticipó que lo hará, al igual que otros.
“Los Estados Unidos no pueden continuar siendo el policía del mundo”, repitió Trump, quien se opuso a que algunos países usen su país y su credibilidad militar para protegerse.
“Ellos no pagan por ello y tendrán que hacerlo”, agregó Trump, que calificó como “ridículo” que las tropas estadounidenses estén en “países de los que la mayoría de la gente ni siquiera ha oído hablar”.
Por otro lado, Trump destacó que con su visita a las tropas en Irak quiere presentar sus respetos a “los grandes soldados” que permanecen en el país árabe. “Es un lugar del que he estado hablando durante muchos años”, apuntó.
Trump tenía previsto reunirse este miércoles con el primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, que finalmente fue cancelada.
“Melania y yo tuvimos el honor de visitar a nuestras increíbles tropas en la base aérea de Al Asad en Irak. ¡Dios bendiga a los Estados Unidos!”, señaló posteriormente Trump en Twitter, donde colgó un vídeo sobre su estancia.