La conocida empresa Bloomberg Economics, parte del emporio del multimillonario y ex alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, que brinda datos y análisis financieros y que cuenta con millones de visitas a sus sitios digitales, auguró que el mal comportamiento de gobiernos populistas y autoritarios, que actúan al margen de las normas internacionales, representarán los principales peligros para la economía mundial en 2019. Pero que el mayor riesgo sigue siendo la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
El reciente informe anual de carácter bipartidista que presenta la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad Estados Unidos-China al Congreso evidenció que si en algo coinciden demócratas y republicanos es que el ascenso de China es un desafío para el país por las amenazas a la cadena de suministro de tecnología, su expansión militar y los esfuerzos por socavar las sanciones a Corea del Norte. Un libreto con serios matices políticos.
Por lo que no debo pasar por alto las declaraciones de John Bolton, el asesor de seguridad nacional de Donald Trump, al decir el jueves en una entrevista con National Public Radio, que los cambios económicos que su país quiere ver en China durante la tregua de 90 días pactada en la cumbre del G20 en Argentina tendrá “un impacto potencialmente profundo en su estructura política” que la obligará a la apertura de su sistema. Entonces, ¿es una batalla para mejorar el balance comercial de intercambio o tras ese fin se oculta un Caballo de Troya?
No es ocioso recordar que el pasado mes de noviembre tuvo lugar en Singapur el Foro de Nueva Economía donde participaron unos 400 líderes políticos y empresariales. El vicepresidente de China, Wang Qishan, dijo en la inauguración que “Las oportunidades surgen de los desafíos”, cuando enfatizó en los retos sobre cómo mantener un desarrollo estable de la economía mundial, atender los cambios demográficos, priorizar lo relativo al cambio climático, remover los rezagos en la gobernanza global y “el auge de pensamientos populistas y unilateralistas”. Persistió en impulsar la paz y desarrollo humanos, respetar las vías elegidas por sus pueblos y buscar soluciones consensuadas en las diferencias.
El evento debatió otros temas, el rediseño del comercio global; los desafíos energéticos de las nuevas economías; el manejo de la próxima crisis financiera; y “la geopolítica de los mercados”.
Bloomberg Economics señaló que si el Brexit no logra una unión aduanera con la Unión Europea puede provocar una drástica disminución del PIB británico con un influjo global; también citó, en el mismo sentido, la posibilidad de que los demócratas, que ahora dominan la Cámara de Representantes inicien diferentes investigaciones sobre Donald Trump. Hay tela por donde cortar.
Finalmente, el texto expuso que la caída en los precios del petróleo este año obligó a muchos países a reconsiderar la importancia de Medio Oriente en este rubro, no faltó en la proyección el grave incumplimiento de Italia respecto a los límites presupuestarios de la UE, que inquieta a inversionistas, así como a integrantes del bloque, e hizo mención de probables cambios en las elecciones del año entrante en economías emergentes, cuyos resultados podrían tener una amplia repercusión. La expectativa de un grave atentado terrorista, sin excluir el ciberespacio, está en el extenso registro.
Aunque se repite, no soy ajeno, que el futuro del mundo dependerá de lo que suceda en el triángulo entre la Unión Europea, Estados Unidos y China. Más peligroso que el Triángulo de las Bermudas.