VARIAS CAPITALES, (AFP/ EFE/AP/REUTERS).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) fustigó a una “larga lista de países” por no hacer lo suficiente para frenar la propagación de la epidemia de COVID-19 que ha llevado a adoptar draconianas medidas que han dejado a cerca de 300 millones de alumnos sin clases y han frenado en seco el turismo, hiriendo de muerte a muchas compañías aéreas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “no es el momento de abandonar (...) ni de hallar excusas, es el momento de ir a fondo”, declaró a la prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien criticó que esa “larga lista” de países no han movilizado todos sus efectivos.
Y es que la epidemia se propaga como un reguero de pólvora por todo el mundo. Ya ha dejado 3,346 muertos y 97,510 infectados, afecta a 85 países de todos los continentes salvo la Antártida y perturba la vida cotidiana de un número creciente de países.
Italia, al igual que Irán, India, Corea del Sur o Japón, ha dado vacaciones a sus estudiantes por la epidemia.
El cierre de 58,000 escuelas, colegios, institutos y universidades es una medida sin precedentes en Italia, donde ni siquiera los bombardeos de la II Guerra Mundial paralizaron los cursos.
Según Organización de Naciones Unidas para la Educación y la Cultura (UNESCO), la epidemia de COVID-19 ha llevado a 13 países a cerrar escuelas lo que afecta a casi 300 millones de alumnos, una “cifra sin precedentes”.
Italia registró otros 41 decesos en las últimas 24 horas por el nuevo coronavirus, por lo que la cifra total subió a 148, mientras aprobó este jueves más de 7,000 millones de euros para hacer frente a la epidemia.
Hace dos semanas, solo China, donde el virus surgió en diciembre, era el único país que cerró sus escuelas.
EE.UU. está mal preparado
El mayor sindicato de enfermeros de Estados Unidos denunció este jueves la falta de preparación de muchos hospitales para enfrentar la epidemia del nuevo coronavirus.
Los enfermeros trabajan sin el equipo de protección necesario y carecen de conocimientos y entrenamiento sobre esta enfermedad que comienza a propagarse en el país, dijo la directora del National Nurses United, Bonnie Castillo.
“Hasta el día de hoy, más de 80 de nuestras enfermeras afiliadas han estado en cuarentena”, dijo en una conferencia de prensa en California celebrada por el sindicato, que afirma tener 150.000 miembros.
“No es una estrategia exitosa dejar a los enfermeros y otros trabajadores de la salud desprotegidos”.
La NNU hizo una encuesta nacional el mes pasado, en la que participaron más de 6,500 enfermeros.
Los resultados fueron “verdaderamente inquietantes”, dijo Jane Thomason, especialista en higiene del sindicato. “Muestran que un gran porcentaje de los hospitales de nuestra nación no están preparados para tratar con seguridad el COVID-19”.
Solo 29% de los encuestados dijeron que había un plan para aislar a pacientes potencialmente infectados en sus lugares de trabajo.
“El 23% informó que ni siquiera saben si hay un plan en marcha”, destacó Thomason, asegurando que más de un tercio no tenía acceso a máscaras protectoras y la mitad no había recibido ninguna información sobre el nuevo virus.
Thomason criticó el manejo del brote por parte del gobierno de Estados Unidos, que considera comenzó tarde y es poco riguroso.
“Ahora es que reaccionamos cuando hace meses podríamos haber sido proactivos”.
Denunció además la decisión de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de reducir los requerimientos para los enfermeros en términos de respiradores y mascarillas.
“No es momento de relajar los criterios”, concluyó Thomason.
En Estados Unidos, donde se han registrado 11 muertos, California declaró el estado de emergencia y un barco de crucero, el “Grand Princess”, con sus 2,500 pasajeros y miembros de la tripulación, quedó retenido frente a las costas californianas tras detectar una veintena de casos sospechosos.
Las previsiones de la Fed vaticinan un crecimiento “modesto” a corto plazo y el Congreso ha aceptado desbloquear más de 8,000 millones de dólares para contener la epidemia.
Pence reconoce deficiencias
El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, reconoció este jueves que en EE.UU. no hay “suficientes” test de coronavirus para hacer frente a la creciente demanda por la expansión de la enfermedad, que ya ha provocado once muertes en el país.
Pence aseguró que a medida que se “expanden los exámenes en el país, van a aparecer más casos”, aunque precisó que la mayoría no tendrá problemas graves.
El Senado aprobó hoy con el apoyo de una gran mayoría fondos de hasta 8,300 millones de dólares para afrontar la propagación de esta enfermedad.
En total, en Estados Unidos ha habido dos centenares de contagios con COVID-19 en 17 estados, la gran mayoría en la costa oeste en los estados de Washington y California, con once fallecimientos.
De esos decesos, diez pertenecen al estado de Washington y la más reciente al estado de California.
Las autoridades californianas intentan contener la expansión de contagios del nuevo coronavirus COVID-19 tras la muerte de una persona que estuvo en un crucero, mientras que Tennessee y Nevada reportaron sus primeros casos y la propagación continúa en el estado de Washington y Nueva York.
Espacios confinados
Transportes públicos, estadios, salas de conciertos o lugares de culto. Todos los espacios cerrados que acogen a grupos de personas son lugares a evitar.
Rusia anuló su principal foro económico previsto en junio en San Petersburgo.
El Parlamento Europeo también trasladó su sesión plenaria prevista la semana próxima en Estrasburgo a Bruselas, debido a la propagación del virus en Francia, donde se han registrado 7 muertos y 138 casos en las últimas 24 horas, con lo que el número total de infectados se eleva a 423 y ya afecta a todo el país.
Japón anunció que se aplazará la visita del presidente chino, Xi Jiping, prevista esta primavera (boreal).
En Grecia, en plena crisis por la migración, 21 de los 24 pasajeros de un autocar, turistas que habían viajado durante varios días a Israel, dieron positivo al coronavirus, aumentando el número de casos en el país a 31.
Muchos países toman medidas para prohibir la entrada a su territorio de viajeros procedentes de zonas de riesgo o imponen cuarentenas para tratar de protegerse de la epidemia.
Treinta y seis países han impuesto restricciones a la entrada de personas procedentes de Corea del Sur, según Seúl, y otros 22 han impuesto medidas de cuarentena.
La Autoridad Palestina prohibió el jueves durante dos semanas el turismo en Cisjordania donde cerró la basílica de la Natividad en Belén, lugar de nacimiento de Jesús, según la tradición cristiana, tras la aparición de siete casos en este territorio ocupado por Israel.
China, el país más afectado
China sigue siendo el país más afectado con 80,409 casos y 3,042 muertos (sin contar los territorios de Hong Kong y Macao).
Le siguen Corea del Sur (6,088 casos -467 nuevos- y 35 muertos), Italia (3,858 casos, contra 3,089 la víspera, y 148 muertos), Irán (3,513 casos, de ellos 591 nuevos, y 107 muertos).
Como Suiza, Reino Unido anunció el jueves un primer muerto por la epidemia, una persona mayor que sufría otra patología.
El virus afecta cada día a nuevos países. Sudáfrica registró el primer caso confirmado, un hombre de 38 años que había estado recientemente en Italia y Chile ya cuenta con cuatro casos.
El mundo del deporte también se ha visto afectado. El encuentro de rugby del Torneo de las Seis Naciones Italia-Inglaterra, previsto en Roma el 14 de marzo, fue aplazado, al igual que el maratón de París, previsto inicialmente para el 5 de abril con 6,000 inscritos, se realizará ahora el 18 de octubre.
Víctima colateral, la compañía aérea británica Flybe echó el cierre, hundida por una caída brutal del tráfico aéreo en el mundo.
En total, las compañías aéreas mundiales podrían perder 113,000 millones de dólares de ingresos, una crisis “casi sin precedentes”, dijo este jueves la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).
OPEP propone un recorte drástico
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) propuso este jueves a sus socios petroleros un recorte drástico de producción de 1,5 millones de barriles al día para frenar la caída del precio del crudo provocada por el coronavirus, una propuesta que ahora tendrá que aprobar Rusia.
Los ministros acordaron recomendar “un nuevo ajuste de 1,5 millones de barriles al día hasta el 30 de junio de 2020”, indicó la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en un comunicado tras una reunión en su sede en Viena.
En esta primera reunión participaron solo los 13 miembros de la OPEP para presentar una posición única a sus otros diez socios petroleros, entre ellos Rusia, y que se reunirán el viernes.
Desde 2017 esta alianza de 23 países, llamada OPEP+, mantiene estrictas cuotas de producción para apoyar los precios. En diciembre aumentó de 1,2 a 1,7 millones de barriles al día sus recortes.