
El papa Francisco ha cumplido este jueves 13 de marzo 28 días hospitalizado en el Policlínico Gemelli de Roma, debido a complicaciones respiratorias.
Con esta cifra, el pontífice argentino iguala la estancia de Juan Pablo II en 1994, cuando el papa polaco fue intervenido para reparar una fractura en la cadera.
La actual hospitalización de Francisco comenzó el 14 de febrero, tras ser diagnosticado con neumonía bilateral.
A lo largo de su internamiento, ha experimentado crisis respiratorias y broncoespasmos, por lo que continúa con oxígeno de alto flujo durante el día y ventilación mecánica con mascarilla por las noches.
Hasta el momento, el Vaticano no ha dado información sobre cuándo podría recibir el alta médica.
Las hospitalizaciones de Francisco y el legado de Juan Pablo II en el Gemelli
Francisco ha sido internado en este hospital en cuatro ocasiones previas:
- 2021: 10 días por una cirugía de colon.
- Marzo 2023: 3 días debido a neumonía.
- Junio 2023: 9 días tras una operación por hernia abdominal.
El hospital Gemelli ha sido el centro de atención médica para los papas en la era moderna. Juan Pablo II fue el primero en ser ingresado allí en 1981, tras ser baleado por el terrorista turco Ali Agca. Su estancia más prolongada en el Gemelli fue de 55 días, cuando fue tratado por una infección en 1981.
En total, el papa polaco fue hospitalizado nueve veces en el Gemelli, acumulando 153 días internado. En una ocasión, incluso bromeó sobre ello:
"El Vaticano Uno está en la Plaza de San Pedro, el Vaticano Dos en Castelgandolfo y el Vaticano Tres se ha convertido en el Policlínico Gemelli."
El último internamiento de Juan Pablo II fue en marzo de 2005, cuando pasó 18 días en el hospital debido al avance del Parkinson. Regresó al Vaticano poco antes de su fallecimiento el 2 de abril de 2005.
Expectativas sobre la recuperación de Francisco
A pesar de que su estado de salud ya no está en pronóstico reservado, los médicos mantienen cautela, señalando que su cuadro sigue siendo complejo.
Por ahora, el pontífice continúa con fisioterapia respiratoria y motora, además de seguir los ejercicios espirituales de la Curia Romana desde su habitación en el décimo piso del hospital.
IO